Terranian, cosmética con un fuerte impacto social
Se definen como la primera empresa cosmética social y sus productos son veganos y naturales, no están testados en animales y son especialmente respetuosos con el medio ambiente. Además, la cadena de manipulación, almacenamiento y envío se realiza a través de fundaciones con personas en riesgo de exclusión social y diversidad funcional, y parte de la venta del producto se dedica a una causa. Detrás del proyecto de Terranian está el emprendedor de 29 años Aleix Cuenca, que dejó su trabajo en una empresa cosmética en julio, se inscribió como trabajador autónomo en octubre y a principios de diciembre ya sacaba su primera propuesta: Pangea, una crema facial, revitalizante, rejuvenecedora e hidratante que pondrá su granito de arena contra el maltrato infantil.
¿Por qué una empresa cosmética social?
Desde pequeño siempre he tenido inquietudes relacionados con la lucha y el cambio social. A medida que te haces mayor, hay profesiones como psicólogos, médicos o enfermeros, que tienen una proyección social más elevada que otras. Soy biólogo y trabajo en el sector de la cosmética, de modo que me planteé cómo ayudar desde mi profesión a cambiar el mundo y mejorarlo en la medida que fuera posible. Así que dejé mi trabajo en julio para iniciar el proyecto de Terranian, con el objetivo de utilizar toda mi experiencia en el mundo de la cosmética para generar impacto social. Así se me ocurrió crear una empresa cosmética cuyos procesos tengan que ver con fundaciones u ONG, en la que pudieran colaborar personas en riesgo de exclusión social o con diversidad funcional. Justo hace dos semanas empezamos a enviar los primeros pedidos.
El primer producto es Pangea.
Estamos preparando formulaciones propias que saldrán el próximo verano, aunque la de Pangea la compramos porque sigue la filosofía de ser un producto ecológico que favorece el consumo responsable. Queríamos salir ya, aprovechando las fiestas de Navidad, que son una gran oportunidad. El cosmético va dentro de una caja de madera, realizada en una empresa que trabaja con personas en riesgo de exclusión social, y la manipulación posterior de ponerla en la caja y cerrarla se ha hecho con una fundación donde trabajan personas con diversidad funcional. También el envío a los hogares de los clientes se está realizando en colaboración con un centro especial de ocupación para personas con diversidad funcional física. Además, parte de los beneficios se dedicarán a una ONG que lucha contra el maltrato infantil.
Una crema natural.
La idea es que los productos tengan que ver no solo con la cosmética social porque implicamos diversos colectivos, sino que contengan también los conceptos de ecologismo, veganismo, y no testado con animales. También ofreceremos un producto de proximidad en las nuevas propuestas. Ahora está Pangea, que es un supercontinente, la madre de los continentes que conocemos, el origen de la tierra. Pero queremos desarrollar productos con nombres de diversas localidades mediterráneas. Estamos elaborando una crema que se llamará Barcelona y que a nivel de formulación contendrá ingredientes de aquí, como la piedra calcárea recordando a Montjuïc o los pinos, por Collserola. La vinculación con la ciudad se plasmará también porque parte de los beneficios se destinarán a una ONG de Barcelona.
La sede de Terranian es el complejo del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y forma parte del ecosistema sanitario formado por el mismo hospital, su instituto de investigación, la Facultad de Medicina y la Escuela de Enfermería (EUI-SANT Pau).
“Estamos elaborando una crema que se llamará Barcelona y que contendrá ingredientes de aquí, como la piedra calcárea recordando a Montjuïc”
Sí, estamos en el coworking Barcelona Health Group, un lugar que consideramos estratégico, porque nuestros productos no solo tienen impacto social y son respetuosos con el medio ambiente sino que tienen una sólida base científica detrás.