El Síndic alerta que cárceles y comisarías antiguas vulneran derechos de presos
Ribó entrega el informe anual del Mecanismo Catalán de Prevención de la Tortura
El balance de una década de informes anuales del Mecanismo Catalán de Prevención de la Tortura (MCPT) arroja luces, pero también alguna sombra, sobre el funcionamiento de centros penitenciarios y comisarías en Catalunya. El Síndic de Greuges presentó ayer el informe sobre el 2020, tras entregarlo al presidente del Parlament, Roger Torrent, y se refirió al “estado de cumplimiento de algunas de las principales recomendaciones que se han trasladado a las administraciones competentes” en los últimos diez años.
Y en ese balance aparecieron las sombras: “La experiencia de este primer decenio –señala el informe– permite concluir que hay espacios de privación de libertad, como algunas comisarías de policía local o los centros penitenciarios más antiguos, que siguen presentando carencias estructurales que los hacen propicios a un trato como mínimo degradante para las personas internas”.
Además, el informe advierte de que “en algunas comisarías aún no se garantiza el derecho a la asistencia letrada dentro de las tres primeras horas desde la detención”, ya que el abogado suele
“presentarse a la hora de la toma de la declaración de la persona detenida”. Asimismo, según el informe, algunos protocolos de funcionamiento, como es el caso de las contenciones mecánicas, necesitan actualizarse cuanto antes.
Durante las visitas realizadas también se ha constatado que las salas de reseña aún no disponen de videovigilancia, aunque la dirección general de la Policía ha identificado esa mejora como “necesaria”, si bien supeditada a los límites presupuestarios. En cualquier caso, el informe subraya que, a lo largo de la última década, “ha habido mejoras evidentes en las denuncias relativas a abusos verbales, o incluso maltratos físicos”. Esas mejoras son, “en buena medida, fruto de las recomendaciones e insistencia del MCPT”, que ha constatado que la Administración “ha iniciado también sus investigaciones internas al ser requerida”. En los últimos diez años se han llevado a cabo más de 400 visitas a un total de 265 centros diferentes, aunque durante el 2020 solo se han podido realizar nueve visitas.
Por último, el MCPT “ha seguido de primera mano el impacto que ha tenido la pandemia en los centros de privación de libertad” y ha constatado la adopción de “medidas en poco tiempo”.