Una noche para celebrar
Perry pone el broche de oro a la toma de posesión de Biden
Dicen que la música amansa las fieras, y eso es lo que hizo Joe Biden en las primeras horas de su mandato: poner música para contentar a sus electores y tender una mano a los trumpistas y especialmente a los que creen que hubo fraude electoral. La pandemia obligó a anular el baile presidencial con el que concluyen los festejos del día de la investidura del nuevo inquilino de la Casa Blanca. En su lugar se emitió el programa de televisión Celebrating America (Celebrando América) en el que participaron estrellas del cine y de la música, convertidas en símbolo de esta nueva etapa en Estados Unidos.
Tom Hanks fue el presentador de este programa especial, que se emitió desde Washington, y que conectó con diversas ciudades del país, desde Miami hasta Los Ángeles, pasando por Memphis. El actor estaba ante el monumento a Lincoln, el presidente que abolió la esclavitud, y frente al National Mall, la explanada en la que se desarrolla una de las escenas más emblemáticas de su personaje Forrest Gump. Una película que es un canto a la inclusión y a la superación de barreras, y que puede significar una metáfora de la voluntad de unión de Joe Biden como presidente.
Frente a la explanada de Wasington, Bruce Springsteen interpretó Land of hope and dreams y The rising, Antes de su actuación declaró estar orgulloso de poder actuar: “Quiero ofrecer esta pequeña oración por nuestro país”. El cantante de New Jersey ha sido de los artistas que más han apoyado a Biden, llegando, incluso a prestarle una de sus canciones más emblemáticas para la campaña como My hometown, de su laureado álbum Born in the USA (1984).
Después de la actuación de Springsteen se conectó con Miami, donde frente al mar, Bon Jovi versionó el tema Here comes the sun , de The Beatles. Le siguieron John Legend, de nuevo frente al monumento a Lincoln, cantando I’m feeling good. Justin Timberlake, desde su ciudad natal, Memphis, interpretó junto a Ant Clemons Better days .Y desde un alto edificio de Los Ángeles y con una espectacular puesta de sol de fondo, Demi Lovato interpretó Lovely day.
El programa iba in crescendo en actuaciones y mensajes, pero faltaba el broche de oro, que puso Katy Perry con su Firework, mientras el gran obelisco y todo el centro de la capital quedaban envueltos en un castillo de fuegos artificiales. La imagen de la cantante californiana y de los fuegos se iban alternando con las de Joe y Jill Biden, desde el balcón de la Casa Blanca, y de la vicepresidenta Kamala Harris y su marido, Douglas Emhoff, contemplando el espectáculo.
En Celebrating America también participaron los grupos Foo Fighters y New Radical, los latinos Ozuma y Luis Fonsi, las actrices Eva Longoria y Kerry Washington, el exbaloncestista Kareem Abduljabbar, el chef José Andrés, el violoncelista Yo-yo Ma, los expresidentes Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama y, por supuesto, los protagonistas del día, el 46.º presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y Kamala Harris, la primera mujer vicepresidenta.