La Vanguardia

Contra el fatalismo

- Director Jordi Juan

Esta semana se ha cumplido un año del confinamie­nto que inició la ciudad china de Wuhan para evitar la propagació­n de unan eumo nía desconocid­a que despuésse haría mundial mente famosa con el nombre de cov id. después llegaría a españa y, desde el 14 de marzo que el Gobierno activó el estado de alarma, el país ha vivido en una continua montaña rusa de emociones sobre su evolución. Las famosas olas han generado un sentimient­o de frustració­n porque cada vez que se ha producido una desescalad­a, una vuelta a lo que se denominó nueva normalidad, los datos epidemioló­gicos empeoraban y volvíamos atrás. Una de cal y otra de arena. Y así hasta ahora.

Si hemos de hacer caso a los datos del Ministerio de Sanidad, España ha llegado al pico de la tercera ola y a pesar de que puede haber un aumento porcentual de hospitaliz­aciones y de muertes en próximos días, esto es debido al proceso de infeccione­s de las últimas dos semanas. Teniendo en cuenta que el proceso de vacunación, iniciado de forma milagrosa en un tiempo récord, ya se ha puesto en marcha, se puede colegir que, si se hacen las cosas bien en estos próximos meses para evitar una cuarta ola, los contagios se irán reduciendo de forma paulatina. Sin embargo, en esta larga historia parece que no acabamos de llegar nunca al final del túnel. Por un lado, porque el ritmo de vacunación no es el esperado y, por otro, porque las nuevas variantes de la covid introducen nuevos signos de alarma. Lo dicho, podemos pasar en horas del optimismo al pesimismo y viceversa.

Nada mejor para entender este clima que leer la entrevista que hoy publicamos al secretario de Salut Pública de la Generalita­t, Josep Maria Argimon, para darnos cuenta de la fragilidad del momento que vivimos. Dudas sobre las mutaciones y sobre la efectivida­d y ritmo de las vacunacion­es, justo cuando las ucis están saturadas de enfermos. El epidemiólo­go Antoni Trilla resume la situación en su artículo semanal con una palabra definitiva: incertidum­bre. Es difícil hacer cualquier pronóstico pero quien firma esto cree que sería un error dejarnos llevar por el fatalismo. Las vacunas acabarán llegando y no está nada clara la gravedad de las mutaciones. No volvamos a caer en el pesimismo.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain