Bruselas quiere PCR y cuarentenas para viajar a las zonas “rojas”, de más riesgo
Las restricciones regirían en áreas con más de 500 casos por 100.000 habitantes
La recomendación que plantea la Comisión Europea para frenar la expansión de la pandemia va de colores y restricciones de movimiento. Color rojo oscuro para marcar las zonas de más alto riesgo, que van acompañadas de PCR y restricciones para las personas que quieran salir de estas áreas. Es la continuación lógica de la decisión de los jefes de gobierno del jueves pasado de restringir al máximo los viajes no esenciales en el interior de la Unión Europea.
Se trata de un difícil equilibrio que debe conjugar las restricciones a la movilidad sin por ello interrumpir el mercado único. “La primera recomendación es no viajar”, dijo la comisaria de Interior, Ylva Johansson,
pero conscientes de que hay que ser realistas, lo que proponen es desincentivar tanto como sea posible los desplazamientos desde estas zonas de alto riesgo, las que tienen más de 500 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, unas áreas que va a incorporar en sus mapas el Centro Europeo para Control de Enfermedades (ECDC).
La situación se ha agravado de tal modo que tienen que incorporar al rojo actual, un rojo añadido, más oscuro, para establecer categorías dentro del alto riesgo. Buena parte de España queda dentro de esta zona, al superar los 500 casos.
A los pasajeros procedentes de estas áreas se plantea exigirles un PCR previo al viaje y una cuarentena a su llegada. Habría excepciones para trabajadores fronterizos y a los que viajen por motivos profesionaa les y familiares. La Comisión Europa quiere que se reduzcan todos los viajes esenciales hasta que la situación epidemiológica mejore, pero muy especialmente en estas zonas de alto riesgo. Unas restricciones que intenta compatibilizar con el mantenimiento del mercado único. “La UE no se puede permitir la disrupción de los viajes esenciales, las cadenas productivas y la distribución de vacunas”, dijo el comisario de Justicia Didier Reynders, al presentar las medidas.
En cualquier caso, esto es una recomendación, un esfuerzo para coordinar un mínimo marco común de medidas, aunque la decisión final en este terreno corresponde a cada país. Dentro de la cacofonía con que los 27 han ido tomando medidas restrictivas en relación con la pandemia, uno de los puntos que se ha consensuado son los criterios para definir las distintas zonas de riesgo, que el Centro Europeo para el Control de Enfermedades actualiza cada dos semanas, y que dibuja un continente con los distintos colores en función del grado de difusión de la covid, pero que lleva meses instalado en las variantes más oscuras. Ahora se crea una nueva área, la roja oscura, para el máximo nivel de riesgo.
partir de este análisis de la extensión de la covid, Bruselas emite unas recomendaciones consensuadas que los países siguen en mayor o menor grado. Bélgica es uno de los que ha ido más lejos en la restricción de movimientos y durante todo el mes de febrero prohíbe los viajes fuera del país por motivos turísticos o recreativos. Solo acepta cuestiones esenciales y justificadas. Es un intento para evitar que las vacaciones de Carnaval, con los viajes que suelen llevar incorporadas, produzcan una nueva subida en los contagios.
“En España las zonas que tienen más incidencia ya han adoptado medidas, no han esperado a que el mapa coloreado apareciera en Bruselas para adoptar medidas, ya aplican cierres perimetrales”, dijo la ministra española de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya.
Ayer por la tarde, la Comisión Europa presentó esta propuesta ante los estados miembros, sin que se tomara ninguna decisión. Nadie se opuso de entrada al planteamiento, pero la mayoría de países pidió más tiempo para analizar una propuesta que había sido presentado el mismo día por la mañana. La irán debatiendo a lo largo de la semana.
La petición de la CE depende de cada Estado y se plantea para desincentivar los desplazamientos