Dos colegiales franceses de 13 y 14 años mueren en peleas entre bandas
La lucha entre bandas rivales, con víctimas cada vez más jóvenes, se está convirtiendo en un grave problema en Francia. En apenas 24 horas, dos adolescentes –una chica de 14 años y un muchacho de 13– murieron en la periferia sur de París en sendos ataques con arma blanca.
El primer caso se produjo en la tarde del lunes en la localidad de Saint-chéron, en el departamento de Essone, en la periferia sur de París. Según indicó la Fiscalía de Evry –la localidad donde fue alcalde Manuel Valls–, se trató de una pelea entre bandas cerca del collège (escuela secundaria) de Pontde-bois. La víctima, Lilibelle G., que recibió un navajazo en el vientre, era la más joven de cuatro hermanos y estaba siendo supervisada por un juez educativo. Trasladada al hospital, la chica murió por la noche. Seis menores de edad, entre los 13 y los 16 años, están detenidos en relación con los hechos. Uno de ellos, con antecedentes penales, confesó ser el autor del navajazo mortal.
Ayer se produjo otro drama en la misma zona al sur de la capital francesa, también en el departamento de Essone, esta vez en Boussy-saint-antoine. Un muchacho de 13 años perdió la vida en la piscina de esta localidad. Se produjo una pelea y el chico recibió una cuchillada en la garganta. Falleció mientras lo trasladaban al hospital. Otro adolescente, de 14 años, resultó herido de gravedad.
La fiscal Caroline Nisand lamentó el fenómeno de las peleas entre bandas juveniles, “que gangrenan Essone y ponen a los menores en primera línea”. El vicepresidente del consejo del departamento, Alexandre Touzet, del partido Los Republicanos (derecha), dijo que el problema de la violencia juvenil debe ser abordado como una prioridad. El ministro del Interior, Gérald Darmanin, se desplazó anoche al lugar del última ataque.
A pesar de la pandemia y de los confinamientos, los enfrentamientos entre bandas aumentaron un 24% en Francia durante el 2020, según datos de la policía citados por el diario Le Figaro .Se tiene constancia de 357 peleas.
Los confinamientos y toques de queda distorsionaron los tráficos ilícitos, como el de estupefacientes. Cuando las medidas restrictivas se levantaron, hubo un rebrote fuerte de la violencia porque las bandas debían reafirmar su autoridad sobre sus territorios. La región Isla de Francia (París y su entorno) es la que concentra los principales problemas. La muerte de una chica resulta particulamente inquietante porque el protagonismo en las peleas suele ser masculino.