Uriach adquiere la firma farmacéutica alemana Sidroga
La empresa farmacéutica Uriach sigue su expansión internacional a través de la compra de laboratorios. El consejero delegado, Oriol Segarra, anunció ayer la adquisición de la compañía alemana Sidroga. Aunque el precio es confidencial, el directivo aseguró que se trata de la mayor compra de la historia de la compañía, fundada en 1838 por la familia Uriach.
Sidroga es una empresa de tamaño medio. Factura unos 60 millones, emplea a 150 personas y cuenta con dos centros productivos que abastecen el mercado alemán, suizo y austriaco. De este modo, Uriach amplía su presencia en Europa, donde hasta la fecha operaba en España, Portugal, Italia, Rumanía y Grecia. Asimismo, la adquisición refuerza su posición en el segmento de autocuidado. Sidroga cuenta con una extensa línea comercial de productos de fitoterapia, tés medicinales y otros fármacos naturales a base de aguas y sales termales. Como Uriach en Catalunya, Sidroga es una empresa con mucha trayectoria en Alemania. Fue fundada el año 1858 en la pequeña localidad de Bad Ems, famosa por sus aguas termales en el oeste del país. En los últimos años, estaba en manos del vehículo familiar Strüngmann (accionistas de Biontech), a quien Uriach ha comprado el 100% de la propiedad a través de recursos propios y una pequeña parte de deuda bancaria.
Segarra explicó que el objetivo de la compra es crear sinergias entre los distintos mercados donde opera y vender productos de ambas compañías en todos los países. La empresa ya llevó a cabo esta estrategia tras la compra de tres empresas italianas –Progine, AR Fitofarma y Laborest– en los últimos años. En rueda de prensa, Segarra reconoció que la asignatura pendiente es Francia, donde quiere entrar con la compra de otro laboratorio en el 2022 o 2023, o incluso antes si surge la oportunidad.
Ayer, el laboratorio catalán también presentó los resultados financieros del 2020. Los datos muestran que la crisis de la pandemia ha frenado el crecimiento a doble dígito que venía registrando en los últimos años. La facturación fue de 240 millones, un 5% más, mientras que el ebitda (beneficio bruto) alcanzó los 48 millones, un 5% más. Segarra explicó que han caído las ventas de medicamentos estrella como la Biodramina (a causa
La empresa familiar catalana ve frenado su crecimiento por la pandemia y factura 240 millones, un 5% más
del freno de la movilidad), aunque han crecido otros segmentos relacionados con el sueño y el estrés, donde Uriach tiene presencia con la marca Aquilea. El 68% de la facturación procede de la división de productos de autocuidado, que ha crecido un 17% en un año. El resto se obtuvo de la producción de medicamentos genéricos para terceros. Segarra se mostró satisfecho con los resultados y aseguró que alcanzará el objetivo de los 300 millones de ingresos en el 2022.
La plantilla asciende al millar de personas. La firma familiar cuenta con dos grandes plantas en la provincia de Barcelona (a las que ahora se suman las dos pequeñas plantas alemanas). Produce el 70% de sus medicamentos y subcontrata el resto a terceros fabricantes.