Las estaciones se reinventan
Los protocolos y los sellos de calidad ante la covid dan un plus de seguridad
La covid ha cambiado muchas cosas de la vida diaria. Y una de ellas es el esquí. Pese a ser una actividad realizada al aire libre, cualquiera de los deportes invernales se ha visto sesgado este invierno. El aforo limitado en la compra de los forfaits, con el fin de evitar grandes concentraciones de esquiadores, junto a los confinamientos y restricciones de movilidad han sido y seguirán siendo todavía el común denominador.
Las estaciones de esquí catalanas, abiertas desde el pasado 14 de diciembre, han cumplido su cometido. Contra viento y oleadas varias, todas y cada una de ellas siguen prestando servicio a los aficionados. En esta fase de la pandemia –que entró en vigor el pasado lunes–, y junto a los esquiadores de la comarca, las pistas siguen centradas en el deporte escolar entre semana, y el esquí de competición sábados y domingos.
Para las estaciones ha comenzado la cuenta atrás de una temporada para olvidar. Y pese a que todo lo que se ha perdido no se recuperará, una suavización de las estrictas y actuales medidas a primeros de marzo podrían dar un halo de luz y esperanza a todas ellas en el tramo final de la campaña.
El aficionado tiene ganas de esquiar. Y no es para menos. El primer confinamiento del año pasado, que cortó de raíz la temporada, y los cierres municipales –ahora comarcales en Catalunya– no lo han puesto fácil. Ricard Font, presidente de Ferrocarrils, explica que “las condiciones de nieve continúan siendo muy buenas. Si las medidas sanitarias permiten la movilidad, los aficionados podrían aprovechar todavía la oferta blanca en Semana Santa”.
Los centros se han adaptado a la nueva era covid con una serie de medidas y protocolos para minimizar cualquier riesgo de contagio. “La obtención del aval del sello de calidad Safe Tourism Certified otorga un incentivo más de cara a los clientes cuando nos puedan visitar, ya que nos acredita como espacios seguros “, explica Font.
Este sello se añade al certificado de calidad de Aenor, que las pistas de FGC obtuvieron el pasado mes de noviembre. Con todo ello, las estaciones de esquí garantizan el mantenimiento, limpieza, desinfección y protección de visitantes y trabajadores.
Baqueira, también con estrictos protocolos sanitarios, ha anunciado igualmente la puesta en marcha de un nuevo departamento de sostenibilidad. El sector del esquí ha tenido forzosamente que reinventarse en una época de pandemia muy complicada. Y aunque en unos meses se podría volver a la normalidad tal y como se conocía hace un año, algunas medidas han llegado para quedarse.
ESQUÍ EN SEMANA SANTA
“Si se suavizan las medidas, los usuarios podrían aún esquiar” , dice Ricard Font, presidente de Ferrocarrils