Confusión y preocupación alrededor de Ansu Fati

Ansu Fati pasó por el quirófano el pasado 9 de noviembre para operarse de una rotura del menisco interno. De inicio eran cuatro meses de baja, por lo que el pronóstico era que regresara al terreno de juego a principios de marzo. Pero la rodilla izquierda del canterano se inflama y el jugador del Barcelona parece dispuesto a pasar de nuevo por el quirófano tras dos contratiempos en su recuperación.

El primero fue en enero, ya iniciada la rehabilitación en el Camp Nou. Se optó entonces por un tratamiento biológico a cargo del doctor Cugat, el mismo que le operó. El propio Barça informó de dicho tratamiento y según pudo saber este diario también se le realizó una pequeña intervención para sacarle líquido de la articulación. Este primer contratiempo hizo que los plazos de reaparición se aplazasen un mes.

Estaba previsto que el joven canterano empezara a hacer trabajo sobre el césped a principios de abril. Pero el dolor reapareció y las alarmas volvieron a saltar. Desesperados, Ansu Fati y su familia optaron por consultar con diferentes doctores. Viajaron hasta Lyon a finales de marzo para visitarse con el gabinete médico de Bertrand Sonnerycottet. También se dejó aconsejar el jugador por otro prestigioso especialista español, el doctor Antonio Maestro. Fati optó de nuevo por la vía conservadora, forzando la rodilla pero sin descartar someterse a una extirpación parcial del menisco que le tendría de dos a tres meses de baja. Según Mundo Deportivo finalmente ha optado por pasar por el quirófano el jueves a cargo del citado doctor Maestro.

Ni el jugador, ni los servicios médicos del Barça, tampoco el doctor Cugat, han confirmado si ya se ha tomado una decisión ante unas complicaciones evidentes que preocupan y de las que no consta oficialidad. En cualquier caso la lesión impedirá que Fati dispute los Juegos Olímpicos y la Eurocopa.