El efecto Baerbock dispara a los verdes en los sondeos en Alemania
A cuatro meses de las elecciones, los ecologistas adelantan a los conservadores en la carrera a la cancillería post-merkel
Los verdes en Alemania, disparados tras la designación de su colíder Annalena Baerbock como candidata a canciller en las elecciones del próximo 26 de septiembre, han adelantado en los sondeos al bloque conservador, con lo que se dibuja por primera vez la opción de que puedan liderar el primer Gobierno de la era post-merkel. En los últimos meses el auge de Alianza 90/ Los Verdes apuntaba ya a su presencia en la futura coalición gobernante, pero las nuevas cifras sugieren que, además, sería factible una canciller ecologista. Baerbock, de 40 años, se convertiría así en la segunda mujer canciller tras la democristiana Angela Merkel.
Faltan cuatro meses para la cita con las urnas, por lo que cualquier vuelco es posible. Ahora mismo, la media de los sondeos de mayo da a los verdes el 25,3%, un punto más que al bloque conservador –formado por la democristiana CDU de Merkel y su socia histórica, la socialcristiana CSU bávara–, que recibe el 24,3%. Mientras el efecto Baerbock impulsa a los verdes, los conservadores arrastran la impopularidad de su candidato a canciller, Armin Laschet, y de la lucha de poder que libró en abril con su socio y rival, Markus Söder, por la candidatura del bloque a la cancillería.
Los analistas concuerdan en que hay una enorme volatilidad en la política alemana, marcada por la evolución de la pandemia del coronavirus, que primero aupó en las encuestas a Merkel y a los suyos por la gestión inicial percibida como positiva, y que después les ha penalizado. A inicios de este año, el bloque CDU/CSU empezó a caer debido al deficiente arranque de la campaña de vacunación, que ahora está cogiendo velocidad, por lo que los conservadores podrían reactivarse y volver al primer lugar del ránking.
Annalena Baerbock, una abogada con solvencia en temas económicos, es una ecologista pragmática que ilustra el tránsito del partido hacia posturas presentes en el punto medio de la sociedad, el codiciado Mitte en el que pesca siempre sus votos la CDU/CSU. Los verdes pueden también reivindicarse como pioneros en la defensa del medio ambiente, ahora que este asunto forma parte del núcleo de preocupaciones de la sociedad.
“Los verdes insisten en la protección del clima y del medio ambiente en todas sus campañas electorales, el socialdemócrata SPD intenta que se hable de vivienda, trabajo y justicia social, y la CDU apuesta por hablar de economía, clase media y seguridad interior, pero la pandemia dificulta la campaña”, resume Frank Brettschneider, comunicólogo de la Universidad de Hohenheim. Según Brettschneider, “si este verano el tema coronavirus, la vacunación, y las consecuencias sociales y económicas de la pandemia desempeñan un papel muy grande en el debate público, puede ser difícil para los verdes colocar sus temas propios en la campaña”.
En cualquier caso, el gran avance de los ecologistas respecto a las elecciones del 2017, en que tuvieron el 8,9% de los votos, les proporciona ya no solo expectativas de gobernar como socios de un nuevo canciller conservador. Con la actuales cifras, podrían ocupar la cancillería al frente de un tripartito con socialdemócratas y liberales, la llamada coalición semáforo (por los colores de los tres partidos implicados).
Pero el efecto Baerbock, alertan algunas voces con memoria, podría diluirse, como ocurrió con el efecto Schulz. En febrero del 2017, el SPD se disparó en sondeos al designar candidato a canciller a Martin Schulz, quien luego pinchó en las urnas. Pero el crecimiento de los verdes ha sido sostenido desde finales del 2018, por lo que sus simpatizantes confían en que persista y aumente con la candidata Baerbock.
Los analistas alertan de la actual volatilidad política; el avance de la vacunación podría reactivar a la CDU/CSU