Un gol de rebote que da vida
Nacho dio el triunfo al Madrid en una acción con fuera de juego posicional de Benzema
El Real Madrid logró en Bilbao una victoria mínima y de rebote que le permite aferrarse al último hilo de esperanza para conquistar la Liga en el capítulo final. Un gol de Nacho, casi involuntariamente, permite a los blancos llegar al desenlace del campeonato a dos puntos del Atlético y todavía con opciones.
Acudía el Madrid a San Mamés con lo puesto, con una defensa de circunstancias una vez más (el canterano Miguel Gutiérrez en el lateral izquierdo, Nacho y Militão de centrales y Odriozola en la derecha), sin sus piezas clave (Kroos, Varane, Carvajal o el desaparecido Ramos), y con la reserva en el depósito de combustible. Aun así, llegaban vivos, mirando de reojo al Metropolitano y sacando fuerzas de la incapacidad goleadora de sus vecinos atléticos ante el Osasuna.
La primera parte fue más bien insulsa hasta que llegó la jugada de la polémica: un balón al codo de Morcillo en un centro de Odriozola en el minuto 28. El defensa rojiblanco saltó girándose al centrar el madridista y el balón impactó en su extremidad superior pegada al cuerpo. Mateu Lahoz, que seguía de cerca la jugada, no vio penalti. El VAR, a cargo de Iglesias Villanueva, tampoco apreció acción punible. Y siguió el juego sin más, para desespero y lamento de los madridistas.
La mejor ocasión para el Athletic fue, en el minuto 43, un lanzamiento de falta lejana de Berenguer que salió rozando el palo derecho de la portería de Courtois.
En la reanudación, el Athletic pareció salir con un poco más de ímpetu que los blancos. En una contra rapidísima, Morcillo conectó un zurdazo (50m) que repelió Courtois, y a continuación
Iñigo Martínez envió a las nubes.
La réplica del Madrid fue una doble ocasión. Primero un disparo lejano de Modric (57m), duro y raso, pegado al poste, que obligó a Unai Simón a estirarse para sacar el balón. Y a continuación, un tiro al travesaño en un remate de cabeza de Casemiro (61m) en un córner servido por el croata. El conjunto blanco se sentía cada vez más cómodo en un partido de ida y vuelta en el que progresivamente se iba adueñando del juego, mientras que el Athletic se replegaba buscando la contra.
La mayor presencia blanca presagiaba la llegada del gol, que acabó cayendo en el minuto 68, y no sin polémica. En un córner en corto desde la izquierda, el centro de Asensio cayó en la banda derecha a pies de Casemiro, que conectó un potente centro-chut, el balón cruzó el área, Benzema en fuera de juego posicional dejó pasar, y detrás del francés, el esférico tropezó en la espinilla de Nacho, que marcó casi sin querer. Mateu Lahoz consultó el VAR y validó el gol, al considerar que el francés no intervino y que Nacho estaba en posición correcta.
El Athletic, abonado a la contra, tuvo el empate en dos ocasiones. En el 77, en un remate forzado de Villalibre a centro de Ibai que se fue alto. Y en el 83, la ocasión más clara, un cabezazo de Vesga que rozó el palo.
El Madrid respiraba aliviado. Aunque Lodi y Luis Suárez arruinaban el liderato provisional, llegarán vivos al último episodio, con la caña a punto y toda la presión para el Atlético.