Pekín ve “infundadas” las acusaciones occidentales por los ciberataques
La brecha entre China y Occidente se ensancha de nuevo. Un día después de que Estados Unidos, la OTAN y la Unión Europea señalaran a Pekín como el cerebro encargado de orquestar una campaña global de ciberataques, el gigante asiático tachó las acusaciones de “infundadas” y de ser un intento por difamar al país.
Su defensa corrió a cargo del portavoz del Ministerio de Exteriores, Zhao Lijian, que criticó la ausencia de pruebas en las acusaciones de Occidente. Aprovechó su intervención para cargar contra Washington,
“la mayor fuente de ciberataques del mundo” dirigidos “no solo contra sus competidores, sino también hacia sus aliados”.
Las acusaciones de ciberpiratería contra el gigante asiático no son nuevas. Washington lleva años denunciando que Pekín está detrás de una serie de ataques contra las agencias federales y empresas estadounidenses. El régimen de Xi Jinping siempre ha negado estas quejas, y replica que ellos también son objeto de numerosos ciberataques venidos desde fuera.
Ayer, diferentes embajadas chinas señalaron que las acusaciones se basan “en especulaciones”. “Lo que el Gobierno australiano ha hecho es extremadamente hipócrita, como un ladrón gritando ‘¡al ladrón!’”, afirmó el texto de la legación china en Australia.
El cruce de reproches se produce en un momento delicado en las relaciones entre Pekín y Occidente, particularmente con Estados Unidos. La llegada de Joe Biden a la Casa Blanca no ha servido para mejorar los maltrechos lazos que dejó Donald Trump. Los conflictos son constantes en asuntos como el comercio, la tecnología o la situación de los derechos humanos en Hong Kong y Xinjiang. Que Washington acusara al
El gigante asiático considera a Washington la mayor fuente mundial de pirateo informático, “también hacia sus aliados”
Ministerio de Seguridad Pública chino de contratar a “piratas informáticos criminales” tan solo añade leña al fuego.
Por ahora, el gigante asiático no parece dispuesto a ceder en sus posturas. “Nunca dejaremos que una fuerza extranjera nos presione, oprima o subyugue. El que lo intente, chocará contra una gran muralla de acero formada por 1.400 millones de chinos”, dijo recientemente el presidente Xi.