Biden sanciona a los represores de Cuba y dice que es “solo el comienzo”
La Casa Blanca respondió ayer con sanciones económicas a la feroz represión desatada en Cuba por la dictadura castrista tras las protestas ciudadanas del 11 de julio. El Gobierno estadounidense responsabiliza de las violaciones de los derechos humanos al ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, Álvaro López-miera, y al ministro del Interior, Lázaro Alberto Álvarez Casas, de quien depende la temida Brigada Especial Nacional, un cuerpo de élite conocido popularmente como “boinas negras” o “avispas negras”. Estos organismos y sus responsables quedan sometidos a la Oficina de Control de Activos Extranjeros de EE.UU.
Tras hacerse públicas las sanciones, Joe Biden emitió una comunicado donde apuntó directamente al “jefe del ejército cubano y la división del Ministerio del Interior cubano que impulsa la represión”. “Esto es solo el comienzo: Estados Unidos seguirá sancionando a los responsables de la opresión del pueblo cubano”, afirmó.
“Nuestro apoyo al pueblo cubano es inquebrantable y nos aseguramos de que los cubanoamericanos sean un socio vital en nuestros esfuerzos por brindar alivio a las personas que sufren en la isla”, agregó el presidente, que endureció su postura contra el Gobierno de Miguel Díaz-canel, desoyendo a los líderes demócratas que piden el fin del bloqueo a Cuba.
Biden exigió al régimen que “libere de inmediato a los presos políticos detenidos injustamente, restablezca el acceso a internet y permita que el pueblo cubano disfrute de sus derechos”. La Casa Blanca ya ha anunciado que trabaja en un plan para que los cubanos puedan acceder a internet para burlar el corte realizado por el Gobierno castrista, y que ampliará el personal de su embajada en la isla.