El embargo como última opción
Los afectados por la causa contable por la acción exterior de la Generalitat intentan evitar a toda costa que se les incauten los bienes. La razón es que si se llegara ese punto, el órgano fiscalizador va a por el patrimonio e incluso cuentas corrientes sin hacer distinción. A pesar de que se trata de embargos preventivos, ya que la causa todavía no ha llegado a la fase de enjuiciamiento, es la peor de las opciones. Aunque la delegada instructora acordara el embargo si no acepta los avales aportados, existe la posibilidad de que se permita entregar fianzas personales elegidas por ellos, para que queden como garantía por si en un futuro fueran declarados responsables contables.