Las nuevas restricciones de tráfico se aplazan sin fecha
Los coches con etiqueta amarilla podrán seguir circulando por la zona de bajas emisiones durante todo el 2022
Una cosa son los planes y otra, su cumplimiento. El Plan Metropolitano de Movilidad Urbana 2019-2024 (PMMU), aprobado el año pasado, marcaba enero del 2022 como fecha orientativa para iniciar las restricciones de circulación a los coches y motos con etiqueta amarilla. Ahora que faltan apenas tres meses para ese momento, las administraciones han considerado que es muy precipitado y lo han aplazado hasta una fecha indeterminada más allá del año que viene.
“Tenemos que sentarnos el Ayuntamiento, la Generalitat y el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) para ver los tempos y las condiciones”, dijo ayer la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en La 2 y Ràdio 4. La cuestión no será inmediata. Desde el AMB confirman que los vehículos puestos en el punto de mira de las próximas restricciones podrán seguir circulando por la zona de bajas emisiones, como mínimo, durante todo el 2022.
No es un colectivo menor, los coches con etiqueta amarilla son los diésel matriculados entre el 2006 y el 2013 y los de gasolina adquiridos entre el 2000 y el 2006. Entre unos y otros representan alrededor de un tercio de los vehículos que se mueven por los accesos a Barcelona.
Una de las razones que esgrime el AMB para justificar el aplazamiento son los efectos de la pandemia, que ya les llevaron a prolongar diversas moratorias a vehículos profesionales sin etiqueta. En los últimos meses han finalizado las exenciones a furgonetas pero hasta el 30 de junio del año que viene siguen con permiso para circular los autobuses y autocares sin distintivo ambiental de la dirección general de Tráfico (DGT).
Las futuras restricciones, si no cambian los planes recogidos en el PMMU, serán por fases. Primero afectará a los coches y motos con etiqueta amarilla cuyos propietarios no sean residentes en los municipios que forman parte de la zona de bajas emisiones (Barcelona, l’hospitalet, Cornellà, Esplugues y Sant Adrià de Besòs). Posteriormente, dos años después, la prohibición se ampliaría a todos los vehículos con etiqueta B, tanto locales como foráneos.c