El madrileño rompió contra el Alavés una racha de cuatro penaltis fallados que comenzó en abril RCDE Tomás
El delantero ha intervenido en tres de los cuatro goles del Espanyol
No son solo goles, aunque sea esa la principal tarea de Raúl de Tomás. Lo que aporta el delantero madrileño a este Espanyol es mucho más y no ha tardado en demostrarlo también en Primera. Todos esperaban que tras el ascenso de categoría mantuviese su ascendencia sobre el césped, pero una cosa es predicar y otra dar trigo. En este comienzo de curso el rendimiento de De Tomás está siendo, junto a la jerarquía de Darder y Cabrera, lo mejor del Espanyol. Necesitaba el equipo un jugador que pudiera sostener sobre sus hombros el peso que implica ser el líder dentro del campo. Y no ha decepcionado De Tomás, que vive cómodo como pocos este tipo de situaciones.
El madrileño se ha echado a la espalda a este Espanyol y ya juegue mejor, como contra el Atlético,
o peor, como contra el Alavés, el equipo blanquiazul siempre tiene un faro que le alumbra hacia la portería contraria. La versión del delantero ha ido de menos a más en estas primeras jornadas y está ya muy cerca de su máximo nivel. Ya no se entiende que el Espanyol llegue al área con peligro si no es gracias a su participación. No en vano, tres de los cuatro goles del equipo hasta el momento llevan de alguna forma su sello.
Con Puado lesionado y Embarba negado de cara a gol, sus dos mejores socios la temporada pasada, De Tomás ha tenido que tirar del carro casi en solitario. Lo hizo contra el Atlético para marcar el primer gol del equipo en la Liga con un testarazo en el primer palo. En el Benito Villamarín volvió a ser clave para fabricar la jugada del primer tanto, que le regaló a Aleix Vidal con un centro preciso al segundo palo. Por último, contra el Alavés dispuso de tres ocasiones y todas acabaron en la portería de Pacheco. Sólo fue válida una, la del penalti, porque el VAR anuló las otras dos por fuera de juego, pero el delantero había cumplido con su obligación de anotar.
De Tomás dio la primera victoria del curso a los pericos gracias a un penalti, su talón de Aquiles la temporada pasada. En la recta final del curso esta se convirtió en su asignatura pendiente al fallar hasta tres penas máximas consecutivas, frente a Albacete, Leganés y Almería. Después de eso, contra Las Palmas decidió ceder la responsabilidad a Adrián Embarba. El mal fario se alargó hasta esta pasada pretemporada, cuando erró un cuarto penalti contra el Rayo Vallecano frente a Luca Zidane. Por eso cuando Melero López decretó la pena máxima el pasado miércoles existían ciertas dudas sobre quién sería el lanzador. Las despejó el delantero, que se apoderó del balón, no defraudó en el disparo y aseguró el tan ansiado triunfo de su equipo, el primero en su regreso a la máxima categoría.
De Tomás firmó la temporada pasada 23 goles y fue el principal argumento del Espanyol para lograr el ascenso. En seis jornadas suma dos tantos en Primera, y sigue haciendo buena la inversión de 20 millones de euros por parte del club.c