Crecer desde la victoria
A Xavi Hernández le salen más las cuentas que las formas. No ha perdido y depende de sí mismo en la Champions, pero el juego todavía no luce continuidad
Después de tres encuentros en el banquillo del Barcelona, Xavi Hernández aún busca un partido redondo. De momento, le salen más las cuentas que las formas al técnico egarense, que, sin embargo, puede seguir con su discurso optimista. El entrenador del Barça es la esperanza personificada desde que llegó de Qatar pero, por si alguien lo dudaba, lo suyo no iba a ser llegar y besar el santo.
El juego no es para lanzar cohetes aunque al nuevo técnico se le aplaude su énfasis en recuperar el estilo. Eso, sí, los buenos minutos no tienen continuidad. En el derbi se vio una primera parte interesante y dominadora, contra el Benfica el mayor peligro llegó en la última media hora coincidiendo con la entrada de Dembélé, mientras que en Vilareal la efervescencia se acabó a los veinte minutos.
Xavi tendrá ahora una semana limpia para trabajar los mecanismos con sus futbolistas. El Betis, que ha ganado cuatro de sus siete partidos disputados como visitante en el campeonato, examinará la mejoría blaugrana el sábado en el Camp Nou.
Otra cosa que ya sabía es que la plantilla tiene carencias estructurales. En los extremos se ha normalizado la presencia en el once de chavales que no han jugado ni 10 partidos con el filial, como Gavi, Ilias o Abde. Por el lateral derecho ya han pasado Mingueza, Sergi Roberto, Dest, Araújo y Eric Garcia, y, a la espera de Alves, nadie ha convencido.
En la punta del ataque, Memphis suma 1.695 minutos porque no tiene competencia alguna, al tiempo que Luuk de Jong no ha jugado con el nuevo entrenador.
Toda esa irregularidad y altibajos tan marcados dentro de un partido provocan que los encuentros lleguen totalmente abiertos a la recta final, donde puede pasar cualquier cosa y Araújo parece cada vez más necesario en defensa. Aunque de momento las jugadas clave están cayendo a favor de los blaugrana. En el derbi, el remate de cabeza de Dimata pudo ser el empate y fue fuera en el minuto 84. Ante el Benfica, con el tiempo cumplido, Seferovic falló a puerta vacía tras regatear a Ter Stegen. El gol habría hecho que el Barça ya no dependiese de sí mismo para obtener el billete a octavos. En el estadio de la Cerámica, cuando peor lo pasaba el Barcelona y el 1-1 ya parecía un premio, un pase largo de Ter Stegen lo aprovechó Memphis después de haber fallado varios goles para hacer el 1-2.
El técnico no dudó en reconocer públicamente que el Villarreal no mereció perder el sábado. Pero lo cierto es que la victoria le da margen para seguir implantando sus ideas. Por primera vez Xavi logró que el Barcelona ganase dos partidos seguidos en la Liga. De hecho, eso no ocurría desde el mes de abril. Han tenido que pasar 20 jornadas para que los blaugrana sumaran un seis de seis. Algo básico para escalar posiciones en la clasificación.
En su día Guardiola se puso más purista después de perder en la primera jornada en Soria contra el Numancia (a la jornada siguiente subió a Busquets y Pedro) y Luis Enrique sacó lo mejor del tridente tras una importante crisis desencadenada por una derrota en Anoeta. Xavi puede seguir creciendo con el buen rollo de la victoria.
Los blaugrana no lograban ganar dos partidos consecutivos en la Liga desde abril