Démare pesca en río revuelto y Juanpe López conserva el rosa
El francés logra el triunfo en un sprint peligroso
En el segundo recorrido por tierras sicilianas antes de poner rueda en la península italiana, el pelotón del Giro llegó a Mesina, ciudad natal del gran ídolo transalpino Vincenzo Nibali, que ayer mismo anunció que este será su último Giro de Italia y su última temporada como profesional.
La victoria en esta quinta etapa se decidió en un sprint desordenado y peligroso. 800 metros de recta. Interminable para unos velocistas hambrientos pero desorganizados por la dificultad de la curva previa a la recta de meta. Allí ya no comparecieron, descartados por los elementos, ni Mark Cavendish ni Caleb Ewan. Tampoco debió hacerlo Arnaud Démare, pero el francés hizo de tripas corazón para engancharse de nuevo a la carrera tras ceder en el Portella Mandrazzi. Mereció la pena el inmenso esfuerzo del equipo Groupama por recuperar a su líder y, entre bandazos y cerrojazos, Démare se llevó la quinta etapa de la ronda italiana. De cerca le siguieron Fernando Gaviria y Giacomo Nizzolo, y Juanpe López conservó el maillot rosa.
En medio del caos, brilló Démare, todo potencia. Porque el francés atesora una enorme clase (acumula 85 victorias en su carrera), pero también porque el Giro es uno de sus paraísos. El 2020 fue su año, con cuatro triunfos, aunque antes ya había ganado otra etapa e incluso llegó a ganar la Milán-sanremo. Este curso aun no sabía lo que era vencer. Su mejor resultado había sido el segundo puesto en la tercera etapa, que se llevó Cavendish.
Quizás por eso, al ver como el británico cedía terreno en el Portella Mandrazzi (2.ª categoría), única dificultad montañosa de la etapa (174 km), Démare se conjuraba. Él tampoco podría mantener la rueda del pelotón ante el empuje de Alpecin-fenix, que quería eliminar al mayor número de rivales para que Van der Poel o Mareczko brillasen en meta. La escapada del día, compuesta por cinco corredores, llegó a su fin poco después de terminar el descenso. Y ahí comenzó una contrarreloj de siete kilómetros en la que Groupama salió victorioso. Démare volvía al pelotón para reclamar el triunfo.
Vincenzo Nibali anunció que este será su último Giro y su última temporada como profesional