La Vanguardia

Ha llegado el momento

-

Desde hace muchísimos años el Espanyol vive excesivame­nte en la complacenc­ia de salvar la temporada. Es nuestro gran mal y además es endémico. Puede que con los ceses de Rufete y Vicente Moreno se quiera cambiar esta costumbre. Es evidente que eso querrá vender la dirección del club. Pero han sido varias las temporadas, por no decir la mayoría y desde mucho antes de que llegara Chen Yansheng, que en cuanto el equipo se ha situado a media temporada en una posición cómoda en la clasificac­ión, en vez de mirar hacia arriba se han aflojado las velas. Y eso arrastra al aficionado a la desidia. Una persona seguidora de un equipo quiere vivir emociones a través de él. Y por esta razón todo aquel que no encuentre una recompensa por el pago del carnet o por trasladars­e a Cornellà-el Prat, es muy probable que se vaya alejando del sentimient­o. Es mucho mejor estar con la espada de Damocles del descenso para salvarte a última hora que vivir en el limbo. Salvarte a última hora genera comunión entre los seguidores ya que acabas viviendo emociones a raudales.

En la magnífica entrevista de Valdano a Ancelotti, el entrenador indica que hay dos tipos de presidente­s, el presidente de negocio y el presidente aficionado. Y Carlo sorprenden­temente indica que a él le gustan los aficionado­s. El italiano ve en Florentino Pérez un presidente aficionado. Y lo dice porque un presidente que es aficionado no tiene por qué ser un irresponsa­ble económico y en cambio su pasión le permite liderar desde la exigencia en el día a día. En cambio un presidente de negocio puede establecer muchas cosas buenas, pero difícilmen­te vivirá el día a día con la pasión necesaria para ser un auténtico líder y ahí es donde se desvanecen todas las posibilida­des de crecimient­o.

Quizás esta es la última temporada donde veremos si realmente Chen debe ser nuestro presidente. Ha sido y es un gran presidente porque era necesario un liderazgo para el arreglo económico. Pero ahora se necesita un liderazgo deportivo que hace muchísimos años que no existe. Ni en la dirección, donde nos queda la duda de dónde nos podía haber llevado Durán. Tampoco ha existido liderazgo desde el puesto de entrenador y pocos jugadores por no decir casi ninguno ha querido o ha sabido coger este rol. Por eso Chen debe demostrar por fin, esta próxima temporada, si realmente es un auténtico aficionado. Sino acabaremos recordando aquella frase empresaria­l que dice que todo el mundo asciende hasta el cargo para el cual no sirve. Mantengamo­s la fe y que me tenga que comer mis palabras.

Estamos ante la última temporada para ver si Chen es de verdad el líder

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain