El presunto asesino de gais de Bilbao estuvo en Catalunya
Los Mossos remiten a la Ertzaintza un informe con una víctima de Pineda que identifica al sospechoso
Lo admitió en su momento el consejero de Seguridad del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, que compareció tras la entrega en una comisaría de Irun del sospechoso al que la Ertzaintza buscaba desde hacía meses como el posible autor de varias muertes en Bilbao. Dijo entonces el responsable de la policía vasca que el trabajo proseguía con mucha intensidad y que los investigadores estaban reconstruyendo los pasos de Nelson David M. B., dentro y fuera de Euskadi. Había constancia de al menos un viaje a Murcia, acompañando a la que entonces era su novia. No fue el único desplazamiento. El individuo también estuvo en Catalunya. Así lo han reconocido hasta ahora dos hombres que, tras ver su imagen en los medios de comunicación, acudieron a sendas comisarías de los Mossos d’esquadra para explicar su relación con el acusado, según han confirmado a La Vanguardia varias fuentes al tanto del caso.
El primero de los individuos acudió la semana pasada a la comisaría de la policía catalana en Pineda. El hombre relató a los agentes que había conocido al colombiano que aparecía en los mecó dios de comunicación acusado de ser el asesino de gais en el País Vasco. No tenía ni la menor duda. Aseguró que le invitó a su casa y que no tardó en darse cuenta de que el joven intentaba emborracharle o drogarle para que perdiera la conciencia con la intención de robarle. El hombre expli
que tenía experiencia en el consumo de sustancias estupefacientes, que intuyó con claridad las verdaderas intenciones del chaval, y decidió echarle a gritos. No había vuelto a saber nada más del joven hasta que tropezó con su retrato en las televisiones, donde era señalado como el hombre al que buscaba la Ertzaintza por la muerte de varios gais en Bilbao.
Con esos datos, los mossos de la Comisaría General de Investigación Criminal redactaron un informe que desde la semana pasada está en manos de sus colegas de la Ertzaintza. Ahora serán los encargados de la investigación en el País Vasco quienes pongan en conocimiento del titular del juzgado de instrucción número 6 de Bilbao, José María Eguía, para que determine si solicitan alguna diligencia a los mossos o comisiona a los ertzainas para que se trasladen hasta Catalunya y prosigan con esa rama de la investigación.
El hombre de Pineda contó que su encuentro con el sospechoso se produjo en el 2020. Pero no fue el único. Casi al mismo tiempo, otro individuo acudió a la comisaría de Gràcia para relatar que reconoció sin género de dudas a Nelson David, al que definió como un “pequeño traficante” que suministraba todo tipo de drogas en locales de ambiente gai de Barcelona.
De este segundo caso la Ertzaintza ha sido informada verbalmente, pero está a la espera de recibir el dossier con los detalles aportados por el testigo. Y aún habría un tercera persona si finamente se confirma que Alexis Mesa Careaga, el cubano que aparece en estas mismas páginas, tuvo un encontronazo con el colombiano de 25 años al que la policía vasca investiga por un homicidio, dos tentativas y relaciona con al menos otras tres muertes de homosexuales en Bilbao.
En todos los casos, el sospechoso actuó movido por el móvil de robar a sus víctimas. Pero habrá que ver si a lo largo de la investigación el juez encuentra en las declaraciones de los supervivientes y de los testigos, un relato
Otro testigo de Gràcia ha contado a la policía que el sospechoso era traficante en bares de ambiente de Barcelona
con datos que le permita añadir a la acusación un componente homofóbico.
No consta que el acusado llegara a tener relaciones íntimas con ninguna de sus víctimas. El hombre al que trató de robar a mediados de diciembre, tras citarse a través de una aplicación, relató a los investigadores cómo el asaltante, al comprobar que no había logrado su objetivo de someterle químicamente con el éxtasis líquido que vertió en su bebida, trató primero de estrangularle agarrándolo por el cuello. La víctima, de mediana edad, forcejeó, se zafó y el agresor aún tuvo tiempo de agredirle golpeándole en la cabeza con una figura decoratición va. “¡Me quieren matar!”, escucharon los vecinos que gritó la víctima.
La Ertzaintza tiene confirmado que además de la aplicación Wapo, el sospechoso recurría a otras como Grind’r, y trata de comprobar hasta qué punto el acusado se aseguraba de la situade cada una de sus víctimas para comprobar sobre todo que estaban solas en sus casas.
En las diligencias de la policía vasca se han ido incluyendo los informes con los montantes que los familiares de las distintas víctimas han ido denunciado que echaron de menos tras las muertes de sus allegados. Bien a través de transferencias o de retiradas en efectivos en cajeros, el sospechoso llegó a ser grabado en el cajero de una entidad retirando efectivo con la tarjeta robada de una de sus víctimas.
Todas las muertes que se investigan se produjeron entre septiembre y octubre del 2021. Poco más de dos meses en los que el sospechoso pudo llegar a conseguir más de 20.000 euros. La Ertzaintza sospecha que pudieron haber muchas más víctimas a las que robó y estafó, pero que no denunciaron en su momento.
Tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil y los Mossos d’esquadra descartan, por el momento, la posible implicación del sospechoso en otras muertes que pudieran responder al patrón utilizado por el joven que se entregó a la Ertzaintza.
Nelson David B. M. entró en España por Madrid hace exactamente tres años, por el aeropuerto de Barajas. Llegó el 2 de febrero del 2019 en un vuelo de Iberia procedente de Panamá y en pocos días lo identificó una patrulla de la Policía Nacional cuando compraba droga a un pequeño traficante. Su estancia en prisión se esta desarrollando sin incidentes. Está acompañado de un preso de confianza y se adapta poco a poco a las pautas y rutinas de su nueva vida entre rejas.
El juez de Bilbao que dirige el caso no descarta sumar a la acusación un elemento homofóbico
La policía vasca estima que el montante robado a todas las víctimas superará los 20.000 euros