Una denuncia colectiva que no deja de crecer
Algunos de los afectados que han abandonado la organización forman parte de la denuncia colectiva que presentó REDUNE, la asociación de prevención sectaria, en marzo del 2021 contra IM Academy. “Cada día se suman más familias a ella”, afirma Carlos Bardavío, abogado de REDUNE. “En Argentina y México también preparan una denuncia colectiva”, subraya Juantxo Domínguez, presidente de la entidad. La denuncia de REDUNE fue la que propició la operación Carcoma de la Policía Nacional, por la que se detuvo a finales de marzo de este año a ocho personas que, según la misma policía, “persuadían a estudiantes, algunos menores de edad, con la promesa de grandes ganancias económicas tras formarse en inversiones financieras y realizar operaciones no permitidas en España”. En su comunicado, IM Academy esgrime que aunque la investigación no les involucra directamente, “debido a la naturaleza independiente de las actividades comerciales” de sus clientes, se toman “muy en serio sus arrestos” y se ponen a disposición de las autoridades “con cualquier ayuda requerida”. Bardavío confirma que, por el momento, no existen medidas cautelares “contra la propia mercantil”, pero están “intentando vincular a estos ocho detenidos con la dinámica de IM Academy”. “Una cosa es el comportamiento presuntamente delictivo de los investigados, y otra es que esto viene a través de unas órdenes y una dinámica propia de la mercantil”, arguye. Defiende que ahora mismo se está investigando “toda la dinámica criminal de publicidad engañosa y de presunta estafa por recomendar operaciones en criptomonedas asegurando que son ganadoras cuando no lo son”. Esgrime que la organización no solo hace negocio a través de la presunta estafa piramidal, sino que alienta a sus clientes a efectuar inversiones en criptomonedas. “Si tienes un ejército de clientes convencido de que las operaciones son ganadoras, aunque no se gane, los que han animado a esas operaciones a través de un enlace de referidos siempre ganan”. Confía en que todo “llegue a buen puerto y haya un juicio con una sentencia condenatoria”.