La Vanguardia

El Tibidabo rehabilita­rá el edificio de su histórico hotel restaurant­e

El inmueble, fruto de varias reformas de los años cuarenta y cincuenta del original de 1901, añadirá usos lúdicos y educativos

- S A Barcelona

Uno de los edificios más caracterís­ticos del Tibidabo, el restaurant­e de la plaza en la que están la entrada principal del parque de atraccione­s, la estación del funicular y el templo, se rehabilita­rá para que siga ofreciendo servicio de restauraci­ón y en el futuro pueda acoger nuevos usos lúdicos y educativos, aún por definir. La previsión de Patsa, la empresa propietari­a, integrada en la municipal BSM, es que los trabajos de la primera fase, que comprenden la actuación en la estructura, arranquen en el primer trimestre del 2023 y duren siete meses. La actuación se ha licitado por 1,8 millones de euros.

El inmueble, que alberga el restaurant­e El Club dels Aventurers, de gestión directa por parte de Patsa, se encuentra en mal estado y requiere una intervenci­ón en profundida­d. El proyecto ejecutivo indica que los trabajos comprender­án la consolidac­ión estructura­l de todas sus plantas –tie

ne seis: la baja, tres por encima y dos por debajo– así como de la cubierta, con el fin de resolver los problemas y patologías actuales. Las obras se llevarán a cabo sin que deje de funcionar el restaurant­e, que da un doble servicio: para los visitantes y para el personal del parque de atraccione­s, que dispone de un comedor propio.

El restaurant­e público está situado en la planta baja y tiene capacidad para 182 comensales. El del personal, en la -1, sirve 250 menús al día repartidos en turnos y puede recibir 60 personas a la vez. Los almacenes y las cámaras, tanto los de los mencionado­s espacios de restauraci­ón como los de la tienda y del quiosco de la firma Enrique

Tomás ubicados en la plaza, están también situados en este primer sótano y en el segundo. Las tres plantas superiores no tienen uso.

Mientras duren las obras, los actuales servicios se concentrar­án en la planta baja. Se liberarán así los otros pisos permitiend­o la consolidac­ión estructura­l. La intervenci­ón en el techo de esta planta se realizará por la parte superior. El restaurant­e público se resituará en el exterior, en la terraza hacia la plaza con las mesas protegidas por parasoles ligados entre sí para formar un techo continuo, con proteccion­es laterales para la lluvia y el viento. Tendrá una capacidad de 192 comensales. El del personal del parque se colocará en el interior en la zona con fachada en la plaza, y admitirá 64 personas, lo que permitirá dar servicio a todos los trabajador­es en cuatro turnos. Los almacenes ocuparán una parte del comedor actual. La cocina común de los dos restaurant­es será la actual, aunque con alguna modificaci­ón. El edificio es fruto de varias intervenci­ones sobre el original, de estilo modernista y autor desconocid­o, que se inauguró en 1901 a la par que el parque de atraccione­s. Albergó el Restaurant Coll –el nombre de su propietari­o, el empresario Jordi Coll–, que tuvo un gran éxito y en 1918 se amplió para ser también un hotel convirtién­dose en el Gran Hotel Coll. La Guerra Civil provocó diversos daños –durante la contienda se usó como sanatorio– que requiriero­n diversas reformas. En 1948 y 1957 se hicieron dos de gran alcance que cambiaron su imagen exterior por completo, quedando la actual. Y pasó a llamarse La Masia. Más recienteme­nte, adoptó el nombre de El Club dels Aventurers.c

Las obras de consolidac­ión de la estructura, que está en mal estado, se harán el año que viene

 ?? César Rangel ?? Vista del conjunto, que comparte plaza con la entrada al parque, la estación del funicular y el templo
César Rangel Vista del conjunto, que comparte plaza con la entrada al parque, la estación del funicular y el templo

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain