Ansia por el Mundial

En este Mundial de Qatar hincharé a favor de Argentina

Me gusta que Argentina se haya clasificado para este Mundial de fútbol, porque eso me permitirá saborear las invectivas que proferirán sus seguidores.

Conocedor de la excelsa creatividad patria, el argentino Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo ha publicado un manual de 21 páginas para prevenir lo que considera excesos. De entrada aconseja no usar la palabra negro ni la construcción piel oscura. Hay que decir afro o afrodescendiente. También advierte que no debe apelarse a la oscuridad a la hora de referir hechos negativos. Pone ejemplos: “Se ve negra la suerte del equipo” o “compró la entrada en el mercado negro”. Ojo también con otras referencias étnicas. Ejemplo: “Las declaraciones del jugador fueron las de un indio; no se entendió nada”. Tampoco hay que caer en estigmatizaciones como “los negros son de correr mucho”. Eviten también pronunciarse positivamente sobre jugadas que impliquen alusiones bélicas: “El rival es el enemigo dentro del campo de juego” u “hoy es matar o morir”.

Y lo de ironizar sobre características físicas de la gente, ni en broma. Hay que promover “enfoques respetuosos de las diversidades corporales y evitar burlas y estigmatizaciones”. No hay que mofarse del peso de un jugador ni de su corte de pelo. Más ejemplos que rechazar: “Ya está viejo para este deporte” o “ese réferi está ciego”. Para acabar, nada de “comentarios sexualizantes o cosificantes”. Aquí, el ejemplo que ponen es: “¡Qué belleza, las hinchas de Croacia!”. Quien sea que haya redactado el manual no ha escogido Croacia porque sí.

No pienso perderme ningún partido de Argentina, mientras refresco constantemente los comentarios del perfil de Twitter “Insultá como un argentino”. ¡Ojalá lleguen a la final, porque así estará en llamas más días, la reconcha de su madre! Después tanto me da.