La apuesta decidida por la gestión sostenible del agua
Agbar, que presta servicio de agua a 37 millones de personas, contribuye a establecer al grupo Veolia como referente en transformación ecológica, con soluciones para la gestión del agua en las ciudades, la industria y la agricultura
La celebración, el pasado 31 de octubre, del Día mundial de las Ciudades ha servido para reflexionar sobre la importancia de aprovechar las oportunidades y afrontar los desafíos que plantea el urbanismo para contribuir a un desarrollo sostenible de las ciudades.
entre los 11 objetivos de la agenda 2030 de Naciones Unidas, en este ámbito, destaca el que insta a “conseguir que las ciudades sean inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles”. en 2016, la ONU aprobó una Nueva agenda Urbana, que define los parámetros de las ciudades del siglo XXI. Uno de ellos consiste en “proporcionar servicios básicos a todos los ciudadanos”, como el acceso a la vivienda, agua potable y saneamiento, alimentos nutritivos, atención de la salud y la planificación familiar, educación, cultura y tecnologías de comunicación.
todo esto ha sido un motivo de inspiración para agbar a la hora de seguir trabajando en soluciones innovadoras para la gestión sostenible del agua y los recursos naturales en las ciudades, la agricultura y la industria. Hoy, esta compañía que forma parte del grupo veolia presta servicio de agua a 37 millones de personas, en más de 1.200 municipios en españa y américa Latina.
Como hub de conocimiento del agua, agbar contribuye a posicionar a veolia, que actúa también en el campo de la energía y la valorización de los residuos, como un referente mundial en la transformación ecológica en los cinco continentes.
Poniendo el foco en la innovación, la digitalización y el impulso de alianzas, el grupo actúa en primera línea en la lucha contra el cambio climático, desarrollando soluciones sostenibles para la reducción y eliminación de la huella de carbono y el paso a una economía verde, generando un impacto positivo en beneficio de las personas y el planeta.
Para ello, agbar ha creado Dinapsis, una red formada por una decena de hubs repartidos por el territorio español que cuenta con servicios digitales de vanguardia orientados a preservar los recursos esenciales como el agua. el uso de tecnologías punteras, como la monitorización en remoto, la algoritmia basada en la inteligencia artificial o el big data, proporciona información útil para la toma de decisiones acordes con la defensa del medio ambiente.
Cada hub está especializado en una temática concreta, atendiendo a la sensibilidad del territorio en el que se ubica, para actuar como acelerador de innovación en el ecosistema local. La combinación de los servicios urbanos ambientales con la labor de divulgación está sirviendo para mejorar la resiliencia de las ciudades, dar respuesta a eventos extremos y preservar los ecosistemas clave.
'SMART CITIES'
Con el objetivo de contribuir al desarrollo de ciudades inteligentes, sostenibles, inclusivas y capaces de adaptarse a los cambios y retos que se plantean, Dinapsis for City desarrolla soluciones específicas que aplican los principios de la economía circular.
Para la adaptación al cambio climático y resiliencia, realizan estudios sobre prevención del riesgo de inundaciones que permiten una mejor gestión de las cuencas hídricas. ayudan a las ciudades a disponer de una red de drenaje capaz de evitar inundaciones de forma sostenible y ofrecen pronósticos y protocolos de actuación para la recuperación rápida tras una situación de crisis.
también disponen de tecnología avanzada y conocimiento experto aplicado a la gestión de la calidad del aire y la movilidad sostenible, para implementar de forma escalable soluciones que mejoren la habitabilidad y salud ambiental de las ciudades.
además, acompañan a las urbes en estrategias de renaturalización, planes de infraestructuras verdes y gestión inteligente de las zonas de baño como áreas turísticas de alta ocupación o zonas de protección para el fomento de un turismo sostenible. su labor permite reconvertir espacios en desuso en nuevas zonas verdes para disfrute de la ciudadanía, con valor paisajístico y en biodiversidad.
La implantación de un modelo de economía circular sirve para identificar sinergias y simbiosis industriales entre organismos (como ayuntamientos, industria y asociaciones empresariales, gestores de zonas naturales y agrícolas, administraciones regionales, etc.) para generar una actividad sostenible a largo plazo que reduzca la presión sobre los recursos naturales.