Rigoberta rima con apoteosis
La cantante catalana agita el Palau Sant Jordi en su adiós temporal
Hubiera llenado el recinto incluso sin el añadido especial de que será la última vez que se la vea en escenarios durante un tiempo indeterminado. ella es rigoberta bandini y el recinto, el Palau sant Jordi (según los organizadores, repleto con 15.000 incondicionales,). Y es que anoche actuó por primera vez en el mismo a modo de colofón de tres años de actividad sin pausa, y aterrizaba unos meses después de pasarlo en grande en el Cruïlla. en esta ocasión, además Paula ribó llegaba a la cita como presentación en su ciudad de su primer álbum, La emperatriz.
La tarde noche se presentaba intensa y feliz. Y para agitar el embrujo sonoro y ambiental ejercieron de teloneros los Ladilla rusa, ese transgresor, crítico (Todos los días lo mismo) y tronchante dúo de montcada i reixac. en este regreso a los escenarios barceloneses después de aquel citado baño de diversión y música veraniego, bandini ofreció a lo largo de una hora y media lo que ya se conoce de su propuesta, es decir, una generosa combinación de diversión, producción escénica y calidad interpretativa. Y luego, claro, un repertorio que hizo las delicias de la entregada afición en donde transitó por su mas bien corta carrera sonora, en donde no faltaron sus hits ya generacionales en boca, corazón y mente de todas y todos, comenzando por Ay mamá (con amplio coro y pechos al aire incluidos) Perra, pero sin olvidar la multicoreada Julio Iglesias. Arrancó el show, eso sí, con otro de sus himnos, In Spain we call it soledad un inicio con el turbo a pleno rendimiento: “In Spain we say ‘its amargura’, in Spain we say ‘ay, me desangro’, in
Spain we say ‘qué coño hago’.
Apareció arropada por un equipo instrumentista brillante, electrónico y muy eficaz encabezado por su colega dentro y fuera del escenario esteban navarro. Y con un nutrido cuerpo de bailarinas,
y también su prima belén barenys en tarea de ocasional y embarazada corista –brutal en Perra rap–. o una invitada como Amaia romero, con la que dio vida a Así bailaba, su particular homenaje a Los payasos de la tele. Y hablando de tributos, a destacar un popurrí de fragmentos de Eres tú de mocedades, Como yo te amo de raphael o La la la de massiel.
Paula ribó apareció con gafas de sol y una bata blanca desbordando brillantina. Prenda que acabó quitándose para mostrar el look de colegiala que tanto la ha caracterizado incluso antes de su boom. en un repertorio previsto de 17 temas, con dos bloques de bises, la catalana revivió canciones de sus inicios, sumó las novedades incorporadas a La emperatriz (como la muy aplaudida Canciones de amor a ti dedicada a su hijo) o algún corte de tempo algo más reposado a guitarra acústica como A todos mis amantes.
También hubo espacio para algunos temas en catalán como la inmortal Qualsevol nit pot sortir el sol de sisa o Aviam què passa, que cohabitaron con las anglosajonas In Spain..., The fuck fuck fuck poem o Too many drugs, corte éste con el que estaba previsto bajar el telón. Lo dicho, noche de diversión, liberación y música. ¿Quién da más?c