Bon Preu invierte 204 millones en su nuevo centro logístico
El grupo apuntala su crecimiento para facturar 2.500 millones
Bon Preu, primer grupo de distribución de capital catalán, invertirá un total de 204 millones de euros en la nueva central logística que proyecta en Montblanc. Se trata de una pieza clave en su plan de expansión en el sur de Catalunya, donde aún tiene margen para ganar presencia comercial.
“Es una inversión importante y estratégica; tenemos operaciones comprometidas en el sur de Catalunya y Ponent, donde prevemos abrir 20 nuevas tiendas”, afirma Joan Font, presidente y director general de Bon Preu. “Situar una plataforma logística con el máximo nivel de eficiencia en esta zona es fundamental para continuar creciendo”, añade Font, que presentó el proyecto ayer en Montblanc. El nuevo centro se sumará a la ciudad logística de la compañía en Hostalets de Balenyà, y le permitirá doblar su capacidad. La primera fase de construcción durará unos dos años y constará de una inversión de 98 millones de euros. Esta incluirá un almacén de producto seco (a temperatura ambiente), con una superficie de 26.500 m2, y otro para el producto fresco y refrigerado de 12.600 m2.
En fases posteriores se ampliará tanto el almacén de secos, que alcanzará una superficie total de 55.900 m2, como el de frescos, que llegará a los 38.800 m2.
Además, se construirá un almacén de logística inversa de 8.900 m2, pensado para el retorno de materiales reciclables procedentes de los supermercados. La superficie total una vez acabadas las obras será de 103.600 m2, con la inversión de 204 millones mencionada. Se estima que el centro logístico dé empleo a 900 personas de forma directa.
De esta manera Bon Preu gana el músculo necesario para llevar a cabo su plan comercial. “Esperamos alcanzar los 2.500 millones de euros de facturación en cinco años”, explica Joan Font, lo que supondría un incremento del 25%. El crecimiento, en todo caso, será orgánico, aunque Font no descarta adquisiciones si se dan las circunstancias adecuadas. El grupo se interesó en su día por la compra de Caprabo, operación que finalmente descartó.
El presidente del grupo espera cerrar el ejercicio actual con unos 2.010 millones de euros de facturación, un 15% por encima del año anterior. Pero aunque las ventas han crecido a doble dígito, espera un beneficio algo menor. “El ebitda será más bajo”, avanza. El grupo ha hecho un esfuerzo –continúa Font– por contener los precios y no repercutir toda la subida de los alimentos. “El consumidor tiene una capacidad de gasto limitada y hemos de convencer a los fabricantes importantes de apretarnos el cinturón”. “No es un año para esperar grandes beneficios”, concluye.
“El consumidor tiene una capacidad de gasto limitada; hemos de apretarnos el cinturón”, afirma Joan Font