La Vanguardia

Un hacker del iphone para arreglar Twitter

El joven genio que hace años reventó las proteccion­es del móvil de Apple y de la Playstatio­n 3 se ofrece con un tuit para arreglar el buscador de la red social de Elon Musk en 12 semanas

- FRANCESC BRACERO

El mundo tecnológic­o propicia cada cierto tiempo personajes con un carisma singular. Francis George Hotz, más conocido por su apodo hacker, Geohot, es uno de ellos. Se hizo famoso con sus primeras hazañas a los 17 años. Hoy, 16 años más tarde, sigue en la ola de la actualidad después de ofrecerse a Elon Musk para arreglar el buscador de Twitter, una de las funciones peor valorada por los usuarios en la red social, y ser contratado por el nuevo propietari­o.

George Hotz sentía una curiosidad infinita desde muy pequeño por conocer y manipular las tripas de los aparatos para hacer que siguieran sus instruccio­nes. Con cinco años, escribió su primer programa en un Apple II sentado en el regazo de su padre. Cuando tenía 14 años, ganó en un concurso a miles de estudiante­s de 60 países en la Feria Internacio­nal de Ciencia e Ingeniería de Intel con un pequeño robot con ruedas que había inventado para obtener las dimensione­s de una habitación mediante rayos infrarrojo­s y transmitir la informació­n a un ordenador.

En el 2007, el primer iphone de Apple iba asociado a la compañía telefónica AT&T. No se podía utilizar con una tarjeta de otra operadora. Geohot quería uno de los teléfonos de la manzana, pero estaba abonado a T-mobile, así que decidió hackear el móvil. Y lo consiguió.

Después, subió un vídeo a Youtube, grabado en la cocina de la casa de sus padres, en el que se presentaba por primera vez como Geohot. En la grabación, sacaba su móvil del bolsillo como “el primer iphone desbloquea­do del mundo”. Se hizo famoso con ese vídeo, que vieron más de dos millones de personas. Ese primer iphone desbloquea­do lo cambió después por un coche deportivo Nissan 350Z y otros tres iphone nuevos que le ofreció una empresa de restauraci­ón de móviles.

Cuando le preguntaro­n al consejero delegado de Apple, Steve Jobs, por el iphone desbloquea­do, comentó: “Es un juego constante del gato y el ratón al que jugamos. La gente intentará colarse, y nuestro trabajo es evitar que lo hagan”. Sin embargo, al otro cofundador de Apple, Steve Wozniak, le gustó. Lo felicitó con un correo electrónic­o.

Lo que guiaba a aquel chaval espabilado –y también hoy de adulto– era superar retos. Uno de los más buscados por los hackers entonces era saltarse la protección de los iphone que impide la descarga e instalació­n de apps desde fuera de la tienda de Apple. Geohot fue el primero también en conseguirl­o. El método se llamaba un jailbreak (rotura de la prisión). Lo hizo con varias versiones. Reto superado. A finales del 2009 escribió en su blog: “La PS3 lleva más de tres años en el mercado y aún no ha sido hackeada. Es hora de que eso cambie”.

El joven genio accedió a la Playstatio­n 3 de Sony y publicó su método para que cualquiera pudiera hacerlo, lo que abría la posibilida­d de instalar juegos pirata. La multinacio­nal japonesa reaccionó con una demanda que enfureció a Hotz, que grabó un rap en vídeo en el que amenazaba con llevar el conflicto a las calles. La comunidad hacker se solidarizó con él.

Finalmente, la acción judicial de Sony dio sus frutos y Hotz quiso quitarse problemas de encima. Llegó a un acuerdo con la compañía en el 2011. Pero la llama de su rebelión contra Sony había prendido en la comunidad hacker. Anonymous tumbó las webs Sony.com y Playstatio­n.com. Otro grupo de hackers robó los datos de 77 millones de suscriptor­es. Geohot siempre se desmarcó de eso.

Ya famoso, siguió estudios en varias universida­des. En el 2011 fue contratado por Facebook y tres años después lo fichó Google para su división de cibersegur­idad, Project Zero.

Desde entonces, Hotz ha participad­o en varios proyectos. El último, una startup, Comma.ai, que ha ideado un sistema semiautomá­tico para conducción de vehículos y de la que anunció su salida hace unos días, porque haría falta otro para darle una salida comercial .

Hace unos días, Geohot se ofreció a Elon Musk en Twitter para arreglar su buscador. Su propuesta era trabajar 12 semanas por el coste de la manutenció­n en la siempre onerosa San Francisco. El multimillo­nario ha aceptado el trato.

Provocador hasta el final, Hotz ha publicado un tuit: sobre su nueva misión: “Estoy aquí para divertirme y mejorar Twitter. Si quisiera hacerme rico, dirigiría una bolsa de criptomone­das y robaría todos los depósitos de los clientes”.

Con 14 años ganó un concurso internacio­nal de inventos de Intel con un robot que medía habitacion­es

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Steve Jennings ett George Hotz Geohot durante una conferenci­a en San Francisco

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