La Vanguardia

Marruecos sacude a Bélgica

Los ‘leones del Atlas’ superaron por juego y actitud a unos decepciona­ntes ‘diablos rojos’, que ahora deberán jugarse la clasificac­ión ante la Croacia de Luka Modric

- Carlos Novo Madrid

Bélgica llegó al Mundial como uno de los candidatos al título tras sus buenas prestacion­es en el anterior certamen en Rusia, donde fue semifinali­sta, pero su paso por Qatar no está a la altura de las expectativ­as previstas ni mucho menos. Marruecos ganó ayer a los diablos rojos gracias a un gol de Sabiri en el 74 y otro de Aboukhlal en el añadido. Los leones del Atlas se mostraron en todo momento más ambiciosos y con mejor juego.

Las estrellas belgas no apareciero­n. De Bruyne estuvo gris y no conectó con los delanteros. Courtois se tragó el primer gol. De Hazard no se espera mucho, y se pareció al jugador insustanci­al de su estancia en el Bernabeu. Lukaku no debe estar para muchos trotes porque Robert Martínez solo le puso en los últimos diez minutos.

Bélgica había ganado con apuros en su primer partido a Canadá. Una victoria les clasificab­a y lo peor fue que pareció jugar con el freno de mano echado, una selección falta de chispa y actitud, como avejentada y de vuelta de todo.

Marruecos fue todo lo contrario. Su última victoria en un Mundial venía del Mundial de Francia en 1998. Había empatado en su debut ante Croacia y desde el silbido inicial jugó como si le fuera la vida. Sus centrocamp­istas controlaro­n el ritmo del juego y si algo se

Bono cantó el himno con sus compañeros, pero no pudo jugar por culpa de una indisposic­ión

les puede achacar es su falta de gol. En Nesiry apenas tocó balón.

El partido nació con una sorpresa. Bono escuchó y cantó el himno junto a sus compañeros, pero quien empezó fue Munir, exportero del Málaga. Bono había tenido que ser sustituido por una indisposic­ión estomacal producida por la medicación que toma para sus molestias en la cadera.

Marruecos llevó la iniciativa desde el comienzo. Bélgica empezó algo mejor que frente a Canadá, pero el empuje de Marruecos les fue sacando del partido poco a poco. En el primer minuto del añadido del primer tiempo marcó Marruecos, pero el VAR anuló el gol. Fue un centro chut de Ziyech que se coló en la puerta de Courtois, pero tras ver el monitor del VAR el árbitro interpretó que Saiss intervenía en la jugada porque tapaba el campo de visión del portero.

A los 74 minutos se consumó el revés para los diablos rojos. Sabiri sacó una falta muy escorada y el balón se coló en la puerta de Courtois, que pudo hacer bastante más. Entró en el 81 Lukaku, y Bélgica se fue arriba con todo. Verthongen pudo empatar en un cabezazo en el 83. El árbitro dio cinco minutos de añadido y en el 93 una contra de Ziyech acabó en un tiro espectacul­ar de Aboukhlal que sentenció. Marruecos lloró de emoción, con sus jugadores arrodillad­os en el césped. El orgullo de los belgas debe ahora salir a flote ante Croacia, o estarán fuera. Courtois y Modric, frente a frente. Es los que tienen los Mundiales.•

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Reuters Un abatido Courtois, tras el primer gol de Marruecos, obra de Sahiri

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