Navidades todo el año
Torrons Vicens logrará ventas récord de 65 millones este año gracias a la desestacionalización, el turismo y el empuje de sus 44 tiendas propias
El pasado 22 de noviembre, las ventas de Torrons Vicens en el año alcanzaron los 52 millones de euros, la cifra récord hasta ahora de la empresa correspondiente a todo un año, el del 2019. Tras la fuerte caída del 2020 y la recuperación del año pasado, el fabricante de turrones controlado por los hermanos Ángel y Eva Velasco Herrero –propietarios únicos después de la muerte de su padre, hace dos meses– ha puesto la directa. Si nada se tuerce en las próximas semanas, la firma cerrará el 2022 con ingresos de 65 millones, un 25% más que antes de la pandemia, y un beneficio bruto de explotación (ebitda) de unos 12 millones.
Una parte de este avance se debe al incremento de los precios del 7% desde el pasado octubre para proteger un tanto los márgenes ante el alza brutal de las materias primas y otros insumos. Pero el resto obedece al avance del consumo, la diversipor
La compañía asegura que el consumo está fuerte pese al alza de los precios, y prosigue su plan de expansión
ficación y la expansión comercial. “Hace diez años, apostamos por la verticalidad y ahora somos fabricantes y comerciantes al mismo tiempo –explica Ángel Velasco, presidente de la empresa– sin que eso suponga ningún problema con nuestros clientes”.
Los ingresos de Torrons Vicens proceden a partes iguales de las 44 tiendas propias y la distribución, incluidas las ventas procedentes del exterior. La exportación, con cuatro establecimientos propios en México y tres en Francia además de ventas con distribuidores por casi todo el mundo, aporta alrededor del 12% de la facturación.
Velasco afirma que el consumo sigue tirando con fuerza y que no se ha resentido, al menos ahora, a causa de la menor renta disponible de las familias por la inflación. “Nosotros no lo hemos notado y, en cambio, estamos preocupados por lo que nos cuesta encontrar gente para trabajar en la fábrica o en las tiendas los fines de semana”, añade.
Pese a su historia centenaria, con orígenes en el siglo XVIII, los propietarios de Torrons Vicens rigen los destinos de la empresa desde el año 2000, cuando el entonces pequeño fabricante de Agramunt (Lleida) contaba con apenas 8 trabajadores y facturaba medio millón de euros. Sin socios externos, reinvirtiendo los beneficios y paso a paso, la compañía se ha aupado al liderazgo del sector en España.
“Hemos logrado desestacionalizar las ventas, de modo que la mitad se dan entre septiembre y diciembre y la otra mitad en los seis meses restantes, cuando el 75% de las ventas son de compradores extranjeros”, concluye Velasco. El directivo cree que tanto en España, donde planea cuatro aperturas para el 2023, como en el exterior, tiene margen de crecimiento.●