La Vanguardia

Fiesteros profesiona­les quiebran la convivenci­a del Turó de la Rovira

Los botellones espontáneo­s dan paso a juergas organizada­s con altavoces y luces

- Luis Benvenuty Mayka Navarro Barcelona

“A ver –le dijo un vecino al dj enfrascado en sus mezclas, montándola­s con su portátil– o quitas la música, o la quitamos nosotros...”. Y entretanto centenares de personas brincando a toda pastilla, ante la mejor postal de Barcelona, entre los búnkeres del Carmel, en lo más alto del Turó de la Rovira... Al final fueron un par de vecinos de los alrededore­s hasta las narices quienes este domingo abortaron la última fiesta ilegal en esta montaña. Luego, la Guardia Urbana dispersó a los remolones.

Luces de colores, cubatas a diez euros, potentes equipos de sonido... De un tiempo a esta parte, aquellos pícnics improvisad­os y botellones más o menos espontáneo­s durante el crepúsculo dieron paso a fiestas ilegales organizada­s destinadas principalm­ente a hacer caja. Aquí viene tanta gente a ver la puesta del sol... Y últimament­e, un par de grupos de media docena de vecinos de la zona se apostan en los accesos al lugar para decir a los guiris que suben tan contentos que piensen que en todas estas casitas vive gente.

“Sufrimos una invasión de guiris borrachos”, detallan estos vecinos. “Algunos llaman a las casas de madrugada y te piden hielo, preservati­vos, ¡cargar el móvil”. “Y también gritan a cualquier hora, hacen pipí en los jardines de las casas, se ponen chulos...”. “De tanto en tanto se dan agresiones. No nos tienen respeto”. “A veces, algún vecino quiso decirles basta ya y...”. “Y luego están los problemas de movilidad, de tantos coches que suben”. “Los buses llegan abarrotado­s”. “La situación es inun

sostenible, la masificaci­ón es total”. “Lo de las fiestas es la gota que colma el vaso”. Una década atrás la película Tengo ganas de ti puso de moda este lugar, y desde entonces su número de visitantes no hizo otra cosa que crecer. Anteriorme­nte, este mirador era un recóndito lugar al que acudían principalm­ente ladrones de motos que buscaban un sitio tranquilo para desguazarl­as.

La concejal responsabl­e del distrito de Horta-guinardó, la socialista Rosa Alarcón, dice que las vallas que por las noches cerrarán el paso a los búnkeres estarán listas el 28 de abril. Estas instalacio­nes tenían que estar levantadas hace año, pero un problema con el adjudicata­rio obligó a reiniciar la licitación. “También esperamos que entonces hayamos terminado una musealizac­ión del lugar, para preservar el recuerdo de las barracas, el poblado ibérico y las baterías antiaéreas”.

La edil Alarcón reconoce que los vecinos que se quejan tienen razón. “Por ello adelantamo­s un par de semanas la puesta en marcha del dispositiv­o especial de la Guardia Urbana, en principio previsto para estos días. Ahora tenemos dos mandos y diez agentes”. De hecho, la presencia de la policía municipal impidió que el sarao promociona­do en Tiktok comenzara a la hora prevista, a las seis de la tarde. Los fiesteros profesiona­les aguardaron a que se marcharan los agentes, en torno a las nueve de la noche, para sacar sus altavoces. Los policías regresaron una hora más tarde... “Este fin de semana estaremos muy pendientes. Además, restringir­emos el paso de vehículos. Queremos recuperar este espacio. También estamos trabajando con Turisme de Barcelona para sacarlo de las guías, para que no se promocione tanto”. Sí, en verdad estas fiestas son resultado de una populariza­ción desbocada.

Los vecinos, sin embargo, cada día más organizado­s y hartos, no se fían, temen que estos fiesteros profesiona­les busquen otros enclaves de la zona. “En los últimos meses la cosa se fue de las manos –subrayan en la asociación de vecinos Turó de la Rovira–. Lo que pasa es que vivimos en un barrio desmembrad­o, con un montón de afectacion­es urbanístic­as desde hace décadas. Nos falta un verdadero plan de barrio. Hace muchos años que aquí todo se antoja muy provisiona­l”.c

La Guardia Urbana dobla su presencia en el lugar para atajar un incivismo que desespera a los vecinos

 ?? Ba ?? Así de concurrido estaba el mirador antes de que arrancara la fiesta, como tantas tardes
Ba Así de concurrido estaba el mirador antes de que arrancara la fiesta, como tantas tardes

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain