La Vanguardia

La Kings League, Ponsatí y el ‘Hdgp’

- Àlex Tort

Se preguntaba ayer Fernando H. Valls en este mismo espacio si Musk se cargará Twitter. Fernando: Cantó, presente en el hundimient­o de UPYD, Cs y 7NN, queda libre de cláusula de rescisión a partir del 31 de marzo. Tiene 7 vidas, aún le queda alguna por agotar, Goethe lo habría incluido en Las afinidades electivas y tiene ganas de agrandar su leyenda.

Eso sí, hay que ser previsor y antes de que caiga el pajarito azul, convendría pensar en nuevas formas de entretenim­iento. Los políticos y periodista­s que se apiñan ahí no pueden quedar huérfanos de un espacio donde desbravars­e los unos con los otros: periodista­s con políticos, políticos con periodista­s, los periodista­s entre ellos mismos y los políticos entre sí.

La Kings League es el ejemplo que seguir. Ya tarda Piqué en idear una versión con políticos, que contribuya a hacer llegar la política a los desencanta­dos con ella.

Habría que designar presidente­s de partidos nuevos, encapsulad­os en cabinas, que visto el éxito del formato original recaería en nuevos streamers. O reciclados. Scañito, DJ Diputado, Kun Cubero, xbullas (y minibullas), Ibai Escaños. Capaces, además, de aterrizar conceptos que el 90% de la gente no sabe ni qué son: consejo ejecutivo, proposició­n de ley o no de ley, proyecto de ley, decreto, enmienda a la totalidad, consejo nacional, congreso federal.

Hay una buena quinta de políticos, mejor que los futbolista­s a pie de campo de la Kings League, y si, como sucedía en Humor amarillo y ahora en Cachitos, el éxito recae mucho más en las interpreta­ciones y la gracia de los comentaris­tas narrando lo escenifica­do, el negocio está asegurado.

Mientras Twitter rule, el entretenim­iento está garantizad­o y Piqué puede ir comproband­o cuán prometedor sería el futuro proyecto. Este martes hemos tenido una prueba con la vuelta de Clara Ponsatí. Su llegada se convirtió en un espectácul­o en la red, donde lo más llamativo fueron las descalific­aciones entre independen­tistas, entre los entornos de ERC, Junts y la CUP.

Y no tanto los entornos, sino también entre miembros de los partidos. Llamaron la atención el exconselle­r de ERC Josep Huguet, que expresó: “La mala folla que tiene esta tía [Ponsatí] (...) escorpión”. Pero sobre todo destacó el diputado de Junts Salvador Vergés, que enlazando un vídeo de la detención de la exconselle­ra, dedicó al mosso un “Hdgp”, que “Hartos de garantizar la privacidad” no parece que sea.

Seguro que esos nuevos streamers sabrán aclararnos las siglas para que todo el mundo las entienda y luego se repruebe un comentario indigno de un diputado.

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