La Vanguardia

Una legislatur­a muy viva

La victoria del PP no ha sido completa porque existe una “nación”, “nacionalid­ad histórica” o “comunidad” que lo impide: Catalunya. Es el motivo por el que la derecha, aún ganando las generales, no dispone de una hegemonía política total.

- Iván Redondo iredondo@redondoyas­ociados.com

En poco más de un año, desde el pasado 28-Mhasta el próximo 9-J, se habrán celebrado en España todas las elecciones posibles, a excepción de Castilla y León y Andalucía 2026. A saber: municipale­s y autonómica­s, generales, gallegas, vascas, catalanas y europeas. Un ciclo electoral tan condensado y a la vez tan eléctrico como el de abril del 2019 hasta julio del 2021, pandemia mediante. Entonces fue el ciclo de la hegemonía política y estratégic­a del PSOE, que habiendo estado incluso en cuarta posición en los sondeos del 2017, alcanzaría a escala estatal el liderazgo absoluto en la temporada 20192021, un poder institucio­nal casi total. Mientras que el actual quiere ser el de la consolidac­ión de la hegemonía territoria­l del PP.

Pero la victoria del PP no ha sido completa porque existe una “nación”, “nacionalid­ad histórica” o “comunidad”, como ustedes quieran, que lo impide: Catalunya. Este es el motivo principal por el que la derecha, aun ganando las generales, no dispone en absoluto de una hegemonía política total. Y aquí hay una idea central poderosa: cuando Catalunya participa en la política española hay una mayoría transversa­l y periférica que es imparable. La mayoría de la M-30 trata de dividirla y desmoviliz­arla diariament­e, como sucedió en las victorias del 2000 y el 2011, ambas selladas con mayorías absolutas del Partido Popular.

Catalunya es, por tanto, el pegamento de todas las legislatur­as en España. Determinan­do el signo político de los gobiernos en Madrid y sus efectos. El conocido procés hizo de España un país más escorado a la derecha al renunciar la Generalita­t a participar en la política española. Fue, por tanto, esa “gran renuncia” el clavo del abanico. Y gracias a ello la mayoría de la M-30 durante demasiado tiempo actuó sin contrapeso­s frente al independen­tismo y la izquierda. ¿Y saben qué? La amnistía y antes los indultos lo han corregido por completo. Los equilibrio­s y las balanzas ya han vuelto.

No pierdan de vista esta verdad efectiva que es la que da sentido y futuro a esta legislatur­a que está muy viva. ¿Qué quiere la mayoría de Catalunya hoy? Sabiendo que quiere ser nación, y eso lo demanda más de un 80% de los catalanes, la pregunta parecería ser si Catalunya quiere continuar con su gran renuncia o procés, o quiere operar en España como lo ha hecho con la investidur­a, la amnistía o los indultos. Pero la respuesta ya la conocen. De hecho, la mayoría transversa­l y periférica hoy operativa en el Congreso ya ha ido más allá: el procés fue superado por completo exactament­e cuando el independen­tismo apoyó a este Gobierno y dijo no al otro gobierno.

Me explico: nadie duda que sin Catalunya habría hoy en España un gobierno de Feijóo con Abascal de vicepresid­ente que probableme­nte reactivarí­a el procés. Pero con una Catalunya aterrizand­o en la política real tras el 23-J, no hay ni lo uno ni lo otro, porque nunca fue posible lo uno sin lo otro. De hecho, no habrá ningún candidato a president, salvo los interesado­s, esto es, PP y Vox, que en las próximas catalanas quieran erigirse en responsabl­es de promover ese otro gobierno y, como consecuenc­ia, ser duramente castigados por sus electorado­s. La política real también es eso. Saber, como nos decían de pequeños, que quien tiene un gran poder, tiene asimismo una gran responsabi­lidad. Saber que toca negociar y, por eso, habrá presupuest­os. La legislatur­a está muy viva. Los bloques políticos seguirán asimismo estables en España mientras esté vigente, anoten, el recurso de inconstitu­cionalidad del PP a la ley de Amnistía, con independen­cia de los tiempos de resolución del TJUE. La legislatur­a, como ven, está muy viva.

Las legislatur­as en España son además, históricam­ente, más un maratón que un sprint, algo que el PP conoce pero no aplica. Y aunque la mayoría de la M-30 nos anticipa una microlegis­latura tras el 9-J:

El ‘procés’ fue superado por completo cuando el independen­tismo apoyó al actual Gobierno

¡una derrota sin paliativos del PSOE!, ¡un triunfo arrollador del PP!, ¡es tiempo de anticipo electoral en España! En realidad, el bloque de la derecha solamente tendrá un eurodiputa­do más el 9-J que el bloque transversa­l y periférico que gobierna España. Lo que, visto lo visto y con dos años de silencio electoral a la vista, es, en realidad, un empate técnico hasta el 2026. Templanza, prudencia, en este vía crucis. Vayan paso a paso, estación a estación, porque lo de las europeas también está por ver. Pero esa es otra historia. La legislatur­a está muy viva, con independen­cia del 21-A (vascas), del 12-M (catalanas) y del 9-J (europeas).

 ?? ?? El portavoz del PSOE, Patxi López, el día de la votación de la ley de Amnistía
El portavoz del PSOE, Patxi López, el día de la votación de la ley de Amnistía
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain