El PP abre en el Senado la incierta vía del conflicto institucional con el Congreso
En su cruzada contra la amnistía, la mayoría del PP en el Senado ha abierto una vía inédita, la de plantear un conflicto de atribuciones con el Congreso, al considerar que la Cámara Baja se extralimitó al cursar como proposición de ley una “reforma constitucional encubierta” que hubiera requerido una mayoría cualificada.
A la espera de lo que responda el Congreso ante este requerimiento sin precedentes que pone al límite las costuras del sistema bicameral –el Senado tradicionalmente ha sido una Cámara de segunda lectura y ahora el PP reclama para él una función “en pie de igualdad”–, la oposición al Gobierno se reserva la opción de apelar al Tribunal Constitucional: “Iremos paso a paso”, se limitó a decir su portavoz, Alicia García.
El debate de ayer sirvió, de nuevo, para que los partidos reiteraran sus posiciones sobre la amnistía, en la que los populares ven un “trágala” remitido desde el Congreso por la necesidad de Pedro Sánchez de obtener los votos de Junts para ser investido presidente, mientras que los grupos que dan apoyo al Ejecutivo fijan el punto de partida en una etapa de diálogo que irá en beneficio de la convivencia en Catalunya.
Así pues, el PSOE calificó de “auténtico disparate” la pretensión del PP de derogar la ley de Amnistía antes de que se publique en el BOE y emplazó a la oposición a esperar y recurrirla ante el Tribunal Constitucional. Salvo Vox y CC, que votaron a favor, y UPN, que se abstuvo. los demás rechazaron el “filibusterismo” de una propuesta “sin recorrido”. ●