La Unesco reclama una mayor inversión de los países para proteger los océanos
Barcelona impulsa un centro para la economía del mar vinculado a la ONU
La Unesco pide a la comunidad internacional que invierta en investigación científica para defender unos océanos cada vez más amenazados por la contaminación y el calentamiento. Así lo reclamó ayer la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, en la apertura de la Conferencia del Decenio del Océano en Barcelona. La idea de que mejorar el conocimiento facilitará la protección de los océanos fue una de las constantes en las intervenciones más políticas de la inauguración.
“Se ha hecho mucho por los océanos, pero aún queda mucho por hacer y se puede hacer. Y para ello, debemos seguir invirtiendo en ciencia. Sabemos que es un momento difícil de crisis, con guerras y división de la comunidad internacional; pero si hay una cosa que puede unirnos, y debe unirnos, es el océano”, defendió Azoulay.
Un ejemplo: solo se ha podido mapear el 15% de los fondos de los océanos y las misiones para rastrearlos son muy inferiores en número a los viajes al espacio.
Barcelona acoge hasta mañana la Conferencia de la Década del Océano, una iniciativa de la Unesco, en la que participan unos 1.500 científicos, representantes de estados y oenegés. El encuentro debe servir para intercambiar y poner al día la investigación sobre los océanos. El Observatorio Europeo Copérnico anunció el martes que la temperatura de los océanos, principales reguladores del clima y que cubren el 70% de la Tierra, alcanzó en marzo un nuevo récord absoluto con una media de 21,07°C en superficie (excluidas las zonas cercanas a los polos). Y más del 90% de los océanos del planeta habrán experimentado olas de calor en algún momento del año. “Nuestros mares se están asfixiando de calor.
Cada año alcanzamos récords negativos de temperatura”, lamentó Azoulay.
En una línea similar se expresó el príncipe soberano de Mónaco, Alberto II: “Algunos pueden pensar que nuestro siglo está experimentando crisis más graves, más urgentes y más profundas que las que afectan al ecosistema oceánico, pero lo que nos reúne hoy aquí es crucial para nuestro futuro”.
El presidente de Cabo Verde,
Jose Maria Neves, se refirió a las numerosas amenazas que se ciernen sobre los océanos, como la pesca ilegal, las migraciones o el tráfico de personas, y resaltó la importancia de este encuentro como “catalizador de los compromisos” para salvaguardar la seguridad de los océanos. “El reto al que tenemos que responder es saber si estamos o no equipados con las respuestas adecuadas”, apuntó. “Debemos entender cómo funciona nuestro océano para poder salvarlo. Desbloquear los misterios del reino marino es la clave”, afirmó Wavel Ramkalawan, presidente de las de Seychelles.
Mark Brown, presidente de las islas Cook, lamentó que los océanos sean una de las áreas en las que menos se invierte en investigación. Y por ello, pidió incrementar las inversiones para que los gobernantes puedan tomar “decisiones bien informadas a partir de la evidencia científica”.
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, subrayó que la capital catalana se ha postulado para acoger un centro dedicado a las actividades de la economía marítima vinculado a la Unesco, propuesta que recibió el apoyo de la ministra de Ciencia, Diana Morant, quien cifró en 110 millones la inversión pública del CSIC en las ciencias del mar en el 2024. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, dijo que confía en que esta conferencia “ayude a sacudir conciencias”. Tras tres días de conferencia, se espera que salga una declaración que, si bien no será vinculante para los países, marcará los criterios científicos ante futuros foros, como la conferencia de Niza en el 2025. ●
“Nuestros mares se están asfixiando de calor”, proclama la directora general, Audrey Azoulay