Los bancos defienden que el problema de la vivienda no es financiero
Los bancos consideran que el problema del acceso a la vivienda en España es un “reto de país” provocado por la falta de oferta, en el que los bancos están en condiciones de prestar el apoyo necesario porque no hay problemas de financiación. Hay 100.000 millones de crédito promotor y un nivel de endeudamiento de las familias de alrededor de 500.000 millones de euros, el más bajo en varios lustros, explicó ayer la presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, en la rueda de prensa anual tras la asamblea de socios.
“Valoro muy positivamente la reunión con todos los agentes”, afirmó en alusión al encuentro en la Moncloa auspiciado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con promotoras, sindicatos, constructoras y bancos. Esta asociación bancaria, que representa a Santander, BBVA, Sabadell o Bankinter, acudió a la Moncloa junto a la CECA, en la que se integran Caixabank y las antiguas cajas. Kindelán subrayó que “hay colectivos concretos a los que se puede ayudar, como los jóvenes”, y recordó que “la responsabilidad de los bancos es financiar”. “Nosotros lo que queremos es estimular la oferta” y “la previsibilidad regulatoria es algo que ayudará a favorecer las inversiones”.
Los bancos, que cifran en 325.000 millones las hipotecas y otros préstamos a particulares concedidos en España el año pasado, acaban de recibir la propuesta del Gobierno para que el ICO avale un 20% de las hipotecas de jóvenes durante diez años. La AEB analizará con buena disposición su contenido, pero serán los bancos los que de forma individual se adscriban.
La presidenta de la AEB también aludió al código de buenas prácticas acordado entre el Gobierno y los bancos para ayudar a hipotecados en apuros tras las subidas de tipos de interés. Las peticiones “han sido modestas” porque hay “baja morosidad”, indicó añadiendo que solo “una de cada cinco renegociaciones vienen del código de buenas prácticas” acordado con el Gobierno. Este
año vencen las medidas dirigidas a la clase media y la AEB deberá estudiar su revisión junto al Gobierno y la CECA.
Sobre la nueva autoridad de defensa del cliente financiero, cuyo trámite parlamentario ha recuperado el Gobierno, la AEB mantiene algunas reticencias. La banca pide que las resoluciones del nuevo organismo no adquieran carácter vinculante por debajo de los 20.000 euros, sino que la cifra se sitúe en 2.000 euros. “El 95% de las quejas se encuentra por debajo de este importe”, argumentó Kindelán. ●