El Constitucional inadmite el recurso de los Rubiralta contra la sentencia de Celsa
La familia fundadora presentó un escrito contra el fallo que les apeó de la propiedad de la siderúrgica
El Tribunal Constitucional ha inadmitido el recurso de amparo de la familia Rubiralta contra la sentencia que homologó el plan de reestructuración de deuda de Celsa y que resultó en su salida de la propiedad. El Alto Tribunal señala que no ha tramitado el escrito al constatar que previamente no se había agotado la vía judicial.
El tribunal señala que la familia debería haber presentado primero un incidente de nulidad de actuaciones contra la sentencia antes de solicitar el amparo, según avanzó ayer Expansión y ha confirmado este medio mediante fuentes judiciales.
La familia fundadora de la multinacional siderúrgica reclamó en su recurso que la sentencia que les apeó de la propiedad había infringido los artículos 24.1 (derecho a la tutela judicial efectiva) y 18 (inviolabilidad del domicilio) de la Constitución porque impuso la reestructuración sin el consentimiento de los socios y, por otro lado, porque esa misma resolución habilitó a Lexaudit, el experto en reestructuración del caso, a acceder a las instalaciones del grupo Celsa.
La sentencia del juzgado mercantil número 2 de Barcelona acordó en septiembre homologar el plan de reestructuración presentado por los entonces acreedores, un grupo de 20 fondos de inversión donde destacan Deutsche Bank, Attestor, SVP, Cross Ocean, Anchorage y Golden Tree. El fallo judicial implicó la capitalización de parte de la deuda y, en consecuencia, la salida de los Rubiralta de la empresa industrial.
El magistrado ¡lvaro Lobato consideró que el plan de los fondos cumplía con todos los requisitos jurídicos y valoró que la deuda bruta de más de 3.000 millones superaba el valor de los activos de largo, según la valoración del experto en reestructuración Lexaudit, que situó el montante en 2.400 millones.
Precisamente, esta semana la nueva cúpula de Celsa, liderada por Rafael Villaseca y Jordi Cazorla, han presentado las cuentas del grupo siderúrgico en el 2023. Si los fondos no hubieran capitalizado su deuda, la compañía habría presentado unos fondos propios negativos de 1.187 millones y el resultado del año se situaría en 918 millones. Finalmente, Celsa cerró el ejercicio con unos fondos propios de 326 millones de euros, una deuda financiera neta de 1.200 millones y un beneficio neto de 469 millones de euros. ●