Viñales es el nuevo sheriff
El de Roses se rehizo de una mala salida, escaló desde el 11.º puesto y superó a Martín y Acosta para convertirse en el primer piloto que gana con tres fábricas
Tenía una cita con la historia, y no falló. Maverick Viòales, el potencial campeón que no llegó, tantas veces irregular, inconstante o errático, se convirtió en el sheriff de Austin con una victoria soberbia en el Circuito de las Américas, remontando desde la 11.ª posición de la primera vuelta, tras superar a los mejores: el campeón Bagnaia, el líder Martín y el gran animador Acosta.
Un triunfo tan extraordinario y merecido como histórico, ya que el piloto de Roses se erigió en el primero que consigue ganar con tres fábricas diferentes en la era de Motogp: con Aprilia, Yamaha y Suzuki.
“Ha sido muy duro llegar hasta aquí, hemos sufrido mucho. Mi familia lo sabe. En Austria no sabía si parar. No podía más. Pero no me ha dado por vencido, he creído en mí mismo. Siempre tuve el apoyo suficiente para seguir levantándome cada maòana”, decía un Viòales emocionado, llorando ante el micrófono de Dazn.
Nada hacía presagiar en la salida que acabaría ganando como lo hizo en Austin. Su arranque fue lamentable, el privilegio de la pole tirado a la basura. Se apagaron los semáforos y fue Acosta el más veloz arrancando, liderando por primera vez en Motogp. Desastroso Maverick, que caía a la 11.ª posición después de tocarse con Bagnaia. Y el de Marc Márquez, regular, de tercero a quinto.
Pronto se fraguó el pulso por la victoria entre Acosta y Martín, al que se sumaron Márquez y Bagnaia, en un duelo a cuatro espectacular. Viòales, sin hacer ruido, escalaba al octavo puesto.
La tensión se disparó a cada vuelta en una carrera espectacular, con infinidad de adelantamientos en los puestos delanteros. Abrió las hostilidades Martín al pegar el hachazo a Acosta para arrebatarle el liderato. Un ataque del que el Tiburón no se pudo defender. Como en la Sprint, Márquez aprovechó el golpe para adelantar al murciano y engancharse a Martín. También Bagnaia imponía sus galones para adelantar a Acosta y ponerse tercero.
Pero lejos de venirse abajo el novato Acosta, se abría un duelo a cuatro por la victoria, en el que faltaba el que sería el ganador: Viòales, que seguía escalando a su ritmo endiablado. Mientras no llegaba, el cuarteto se desangró.
El primero en venirse abajo en la reyerta fue el campeón Bagnaia, que recibió la dentellada insolente de Acosta para situarse segundo (v. 7), y también la de un Márquez que se veía ante su gran oportunidad en su circuito fetiche, donde ha ganado siete veces.
Sin embargo, el de Cervera sería el segundo en desaparecer de la ecuación. Lo haría, irónicamente, justo después de haberse situado líder. En la vuelta 10, Acosta se lió la manta a la cabeza y lanzó su ataque a corazón abierto por la victoria. Con descaro y agresividad se comió a Martín para ponerse primero. Pero le duró poco, porque Márquez superó al madrileòo y a Acosta para asaltar el liderato (v. 11). Sin embargo, cuando el de Cervera tiraba con fuerza para abrir hueco y consolidar el liderato se fue al suelo. Perdió la rueda trasera de su Ducati y se deslizó por el asfalto. Acosta volvía a liderar... aunque ahora tenía otra amenaza: Viòales.
Por detrás llegaba con fuerza Maverick, que se quitó del medio
Con su doblete en Austin, victoria en la Sprint y en la dominical, Viñales se revaloriza y es tercero del Mundial
a Bagnaia y a Martín para ponerse segundo. Y sin pausa, con la inercia, metió la rueda al murciano sin complejos, y con un ritmo superior se hizo con el liderato en la vuelta 13/20.
El ritmo de Maverick era demoledor. En pocas vueltas distanció a más de 1 segundo a Acosta, que a su vez distanciaba a Martín a 8 décimas. El murciano repetía podio, el más joven de la historia en lograrlo (desbanca a Márquez).
En los últimos giros, Viòales amplió su renta sobre Acosta a 1,4 segundos para asegurar su doblete americano, hacerse valer y resituarse en el Mundial en el tercer puesto, a 24 puntos de Martín.
El líder sufrió el ataque furibundo de Bastianini, se quedó sin respuesta y sin tercer puesto, la primera carrera en la que no sube al podio este aòo. Aunque mantiene el mando del Mundial. ●
“Ha sido muy duro llegar hasta aquí, he sufrido mucho. En Austria no sabía si parar”, descubre Mack