Un vía crucis
La eliminatoria entre el Barcelona y Paris Saint Germain permitió que el futbol nos mostrase que en muchas ocasiones para conseguir los objetivos deseados lo mejor es no tener opciones. Lo que a todos nos gustaría tener siempre, es decir diferentes opciones para así poder escoger la mejor, acaba condicionando nuestro comportamiento y no nos permite hacer las cosas plenamente convencidos.
El partido se inicio con el equipo de Luis Enrique concienciado de que no podía dejar pasar ni un segundo para tratar de perforar el marco rival. Porque existía en su mente la obligación y el convencimiento de que solo marcar les daba la seguridad de seguir en la lucha. El Barcelona, sin embargo, vivía en el traicionero mundo de las opciones. Me expando en cuanto tengo el esférico para tratar de marcar un gol o hago lo justo para no perder mi capacidad defensiva. Así pasaron casi 15 minutos donde la posesión de la pelota nunca estuvo en el repertorio azulgrana. Solo la efectividad de Raphinha en una gran jugada de Lamine Yamal.
Pero llegó la expulsión de Araújo, una penitencia demasiado dura para una eliminatoria de cuartos de la Champions y peor aún frente a un equipo de las características de los franceses. Y ahí se generó el vía crucis azulgrana. De poco servía la ventaja de dos goles a favor, si la rigurosidad defensiva no estaba al máximo nivel. Al final, al margen del gran gol de Dembélé tras magnífica jugada de Barcola, que fue el jugador donde se apoyó el PSG, una expulsión más que rigurosa, un penalti absurdo de Cancelo y un gol en la frontal del área que jamás debe suceder, fueron demasiado castigo.
Luego hubo reacción de manera sorprendente y ratificando lo positivo que puede ser no tener opciones. Un Barcelona desgastado por la ausencia de uno de sus jugadores, fue capaz de llegar al área del PSG en varias ocasiones. Fue entonces cuando los franceses entraron en el mundo de las dudas, cuando con el nivel que
tienen y el ser un jugador más, debía ser suficiente para sentenciar. Tuvieron que esperar a un Barcelona desesperado par acabar goleando.
Seguramente habrá mucha gente con ganas de hacer ya balance y lo malo para los azulgranas será que se realice desde los resultados. Si la referencia es que los de Xavi están ya sin aspiraciones de nada en el mes de abril, puede que el futuro sea complejo. Si el análisis se realiza desde el crecimiento del equipo, puede ser que el proyecto siga con la tendencia marcada que es positiva. Quizás es el momento de valorar todo lo que ha mostrado este equipo en los últimos meses porque sinceramente yo veo un equipo en crecimiento.