Mejor jugar en los parques que en las pantallas
El Ajuntament aprueba una Medida de Gobierno de seis millones de euros a programas dirigidos a niños, niñas y adolescentes para que aprendan a utilizar bien las pantallas y para promover el ocio saludable
Paseando por la calle: un niño en el cochecito con un móvil en la mano mira dibujos. En la sala de espera de la pediatra: dos hermanos juegan con el móvil. Encerrado en la habitación: un preadolescente navega por webs porno. En la plaza: un grupito de adolescentes se hacen selfies. En el instituto: una alumna habla por el móvil mientras el profesor imparte la clase. No son casos aislados. Las pantallas han irrumplido en las vidas de niños y adolescentes, se han apoderado de su tiempo y a menudo pasan por delante de todo. Muchos y muchas están enganchados. Los datos lo corroboran: el 49% de los niños y niñas tienen discusiones con la familia por el tiempo que dedican a internet, el 68% de los adolescentes cenan frente a alguna pantalla y una de cada cuatro chicas declara haber sufrido maltrato por internet.
Esta realidad y la alerta de los efectos nocivos que puede provocar el uso inadecuado de la tecnología –alteraciones cognitivas, problemas de salud relacionados con hábitos alimenticios o de salud mental y malestar emocional, sedentarismo, obesidad o el riesgo de sufrir adicciones en los dispositivos móviles– motivó al consistorio a poner en marcha un proceso participativo que ha tenido como resultado la Medida de Gobierno “Acciones 2024-2027 para el bienestar digital. Educamos y promovemos un uso saludable de las pantallas en la infancia y la adolescencia”.
La Mesa de Salud Mental de Barcelona ha creado un grupo de trabajo para impulsar la Medida de Gobierno, que ha establecido tres líneas de intervención: la promoción del uso crítico y saludable de las pantallas mediante acciones y programas educativos y de promoción de la salud; el fomento de actividades de ocio alternativo, y advertir que el abuso de las pantallas supone un problema de salud pública que debe abordarse desde los diferentes servicios existentes y a partir de un trabajo en red.
El Ajuntament invertirá seis millones de euros para desplegar este plan, que incluye 51 acciones para prevenir el acceso prematuro y excesivo a las pantallas y contenidos inadecuados, y evitar conductas de riesgo y adicciones.
Entre las acciones a realizar existen ya diferentes programas municipales que se llevan a cabo en las escuelas, “lo que nos permite llegar a toda la población infantil, y que incorporan acciones y recursos para trabajar desde la prevención el bienestar digital”, dice Anna Morancho, técnica del departamento de Salut Mental. Entre estos programas destacan: “1, 2, 3 emoción”, con el que se trabaja la educación emocional en las primeras etapas educativas, y “Cara o cruz”, dirigido a estudiantes de 4º de ESO para abordar los juegos de azar y las apuestas en línea. También hay programas de habilidades “para acompañar a las familias en la educación de los hijos e hijas en los que se incluyen recomendaciones sobre el uso de las pantallas”, añade.
La segunda línea de actuación se aborda a partir de diferentes iniciativas que facilitan un ocio alternativo y saludable (ver información con los programas municipales). La tercera contempla la formación de referentes en el ámbito de la educación y la mediación digital entre quienes trabajan en equipamientos municipales. “Así podrán acompañar a familias, niños, adolescentes, etc., y ayudarles en la alfabetización digital”, explica la técnica municipal. Y añade: “Queremos acompañar a las familias teniendo en cuenta que existen múltiples realidades, reflexionar sobre cómo se utiliza la tecnología y en qué espacios. Por ejemplo, sería bueno que hubiera espacios libres de móviles, como los parques infantiles. Si estamos allí, mejor jugar que estar pendiente del móvil. Pero aquí entramos en otro tema: el uso de las pantallas por los adultos”, reflexiona Anna Morancho.