Las plantas llegarán a La Hoya en enero
Los trabajos deben culminar en el primer semestre del año 2023, posiblemente entre marzo y abril
Con delicadeza, siguiendo la labor artesanal de aquellos que hacían muros fuertes con piedras, los trabajadores de la UTE formada por Jarquil y Copsa han ido recuperando casi todos los balates del paraje de La Hoya que marcan los confines de las paratas que antaño se dedicaban a la agricultura. Esa agricultura en la que no había plásticos ni prisas, y en la que el agua era casi tan fundamental como ahora.
La zona que se encuentra a los pies del Cerro de
San Cristóbal es la parte que se encuentra más avanzada, al menos visualmente, de las obras que están convirtiendo La Hoya en un Jardín Mediterráneo siguiendo el diseño, algo remozado, que hace una década crearan Kauh Arquitectura y Paisajismo S.L. dejándose llevar por la naturaleza que ya da vida a este entorno comprendido entre el cerro, la Muralla de Jairán y la Alcazaba.
Al 70% se encuentra la ejecución de unos trabajos que ha visitado la alcaldesa de Almería,
Ejecución
María del Mar Vázquez, y la concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, junto a los arquitectos del proyecto y los representantes de la UTE Jarquil-Copsa. Explicaba la regidora de la ciudad que “la previsión es que las obras estén listas en el primer semestre del año 2023” aunque “ya se han completado hitos tan importantes como la consolidación de las paratas y que encamina la ejecución de los siguientes hitos marcados en el cronograma de este proyecto: la recuperación de los sistemas de riego, albercas y con ellos la llegada del agua, como elemento fundamental que será también de esta actuación”.
De hecho, según explicaba Juan Antonio Sánchez Muñoz, arquitecto y paisajista del proyecto, “la expectativa es que a lo largo del mes de diciembre se consiga la llegada del agua para que en enero y febrero se pueda proceder a la plantación de las diferentes especies que llenarán La Hoya”. Explicaba su compañero de estudio de arquitectura, Vincent Morales Garoffolo, que el riego, principalmente en las paratas, funcionará siguiendo “la forma tradicional que conectaba las dos albercas existentes, una en la zona alta y otra en la baja, a través de canales por los que pasaba el agua” aunque también contará con “un sistema de riego por goteo”.