Al consejero Pacheco. Artos, linces y pedreas
Estimado Don Ramón, otra vez los ecologistas le enmiendan la plana mientras suelta linces. Lo de los linces es una gran noticia. A medias. Que dos machos refuercen una población que crece paulatinamente, es magnífico, pero si destrozan sus hábitats no sirve de nada.
Es curioso que en la misma semana que la IUCN, saca al Parque Nacional de su Lista Verde, fuercen unas fotitos soltando linces y presumiendo de comprar la finca Veta la Palma para garantizar el futuro de Doñana, como si agrandar la cocina garantizase que la dieta será saludable.
Presumen de linces y flamencos mientras desarrollan una economía que destroza sus hábitats, construyendo hotelitos para privilegiados, y una gran urbanización, en el corazón del Cabo de Gata; desviando, con la sequía avanzando y los grifos inservibles, el agua de Sierra Nevada para las pistas de esquí y seguir vendiendo forfaits; o desarrollando una agricultura intensiva que deja sin agua a determinados barrios de Almería por radioactividad a causa de la sobreexplotación de los acuíferos.
Menos mal que los ecologistas siguen al pie del cañón. Gracias a ellos no se cargó el Bosque de la Plaza Vieja, no ha secado Doñana, las Salinas de Cabo de Gata se recuperaron, y ahora, a través de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, han corregido el error-delito de descatalogar el LIC Artos de El Ejido. ¿Ahora qué, un millón de pedrea? Por desgracia no es tan fácil, los elefantes no resucitan con un “lo siento mucho, no volverá a pasar”.
Por cierto, los ecologistas, ya avisaron a sus técnicos de que el canal de las Salinas de Cabo de Gata se ha vuelto a romper. Confiemos que esta vez, sin elecciones próximas, ni miedo a perder votos, no las dejen secar.
Aprovecho, Don Ramón, para desearle un próspero 2024. Bueno, no, que prosperar para ustedes es multiplicar beneficios económicos a costa de lo que sea. Lo cambio por Feliz año nuevo.