El nuevo negocio que elabora “los mejores churros de Almería”
Cafetería Churrería ‘Mi Fran’ abrió sus puertas este jueves en el barrio residencial de Villa Inés
Se pueden comer tanto para desayunar como para merendar. Hay quienes lo mojan en el café o en una taza de chocolate recién hecho y pueden ir directos al paladar rebozados en azúcar o en su estado original, recién salidos del aceite hirviendo. Los churros son una tradición en Almería, tierra que cuenta desde el pasado 28 de diciembre con un nuevo templo en el que se elabora este imprescindible gastronómico con el que muchos cerrarán esta Nochevieja al amanecer.
El pasado jueves abría sus puertas la Cafetería Churrería ‘Mi Fran’, un nuevo negocio que se anunciaba en redes sociales con un mensaje contundente: “Si estáis dispuestos a probar los mejores churros de Almería, sois bienvenidos”. Y hubo muchas personas que recogieron el guante lanzado en dicha publicación de Facebook e Instagram y pusieron rumbo hasta Villa Inés, en el término municipal de Huércal, para comprobar si era cierto.
Ilusión “La verdad es que fue muy bien nuestro primer día, mucho mejor de lo que nos esperábamos, porque acudió mucha gente”, asegura Francisco Javier Fernández Piñero, joven de Benahadux que está detrás de este negocio que, con su horario de 5:00 de la madrugada a 14:00 horas de la tarde, está claramente enfocado a los desayunos. Pese a ello, además de churros y tostadas, también
Francisco Fernández, un benaducense de 29 años, se estrena como emprendedor hostelero
ofrecen algunas tapas como ensaladilla rusa o carne con tomate para los clientes que prefieran una cerveza.
La churrería está ubicada en el número 18 de la calle Río Guadalfeo, en una zona que es frontera del municipio huercalense con Almería capital y que tiene al lado polígonos industriales como el de San Rafael. “Busqué anuncios de posibles locales y me decidí por este, que es de alquiler con opción a compra”, detalla Francisco, que ha sus 29 años de edad ha tomado la decisión de convertirse en un emprendedor.
El propietario de la nueva cafetería, en la que también trabajan Verónica y María, ha pasado por distintos sectores. Estuvo en la construcción y en un almacén agrícola antes de recalar en la hostelería. Durante dos años fue empleado de una churrería, donde conoció los secretos de este rico producto que le apasiona y le ha llevado a emprender su propio negocio, donde despacha churros tradicionales, los de toda la vida. “Se me da bien y la acogida por parte de los vecinos ha sido muy buena”, asegura.
Convencido de que los churros de ‘Mi Fran’ son “los mejores de Almería”, algo que ya han corroborado numerosos clientes que han dejado comentarios muy positivos, este nuevo negocio empieza pisando fuerte y con ganas e ilusión de convertirse en un referente de los desayunos en una provincia que tiene predilección por los churros y en la que hay históricos negocios que los han convertido en su seña de identidad.