“Para ir a comprar un boli,hemos tenido que hacer álgebra y malabares”
El alcalde más joven de la provincia ante el reto de ‘desbloquear’ su pueblo: 750.000 euros tienen la culpa
En una época en la que las ciudades no dejan de crecer y los pueblos del interior tienden a desaparecer a medida que lo hacen sus mayores, este pequeño municipio de la Alpujarra Almeriense ha ganado en número de habitantes, superando los 700 en el último censo, un buen número de ellos jóvenes.
No deja por ello de ser paradójico que este pueblo, con tanto futuro por delante, se vea obligado a no poder contar con nuevas infraestructuras y servicios. La culpa de ello la tienen 750.000 euros que su Ayuntamiento tiene de deuda con la Seguridad Social, que imposibilita que Alhabia pueda optar a recibir una serie de subvenciones para mejorar el pueblo o, también, para comenzar a liquidar una deuda aún mayor, de 7 millones y medio de euros. Todo ello, arrastrado “por la gestión de las últimas tres décadas”.
Con esa problemática, al frente del Ayuntamiento se encuentra, desde las pasadas elecciones municipales, Luis Manuel Martínez Amate (PP), que es, con 26 años, el alcalde más joven de toda la provincia, y que tiene ante sí el enorme reto de desbloquear esta situación.
En la mesa de su despacho, varios post-it con nombres, números de teléfono o tareas pendientes realizar. Vecino del pueblo, voluntario de Cruz Roja con 16 años y técnico de ambulancia en Torrecárdenas, actualmente en excedencia, ha mantenido desde su adolescencia una relación cercana con el anterior alcalde, José Núñez (PSOE) a través de la colaboración en activi“Somos dades, pero “jamás imaginaba que me iban a proponer como cabeza de lista por un partido”, en este caso, el PP.
Tras cuatro años en la oposición, “sabíamos que las cosas estaban mal, pero tampoco teníamos todos los datos, había mucha opacidad”. Llegó a sentir “impotencia” y a plantearse “dimitir” por ello. Al llegar a la Alcaldía, el pasado mes de junio fue cuando vio lo que había. “Si pudiera volver atrás, igual me lo pensaba”, reconoce. “No me podía imaginar que estuviera tan mal”, añade.
Con ganas y juventud, “ahora tenemos un prode blema detrás de otro, pero vamos tapando y parcheando”, pero “pasarán años y años para que Alhabia se recupere”, porque “el Ayuntamiento estaba para que lo intervinieran”. “No había secretario, ni contabilidad, papeles. Cuando entré yo, fue la primera vez en diez años que se pagaron cargas sociales a los trabajadores. Lo que sí había era la deuda con Seguridad Social y sentencias judiciales por otras deudas con empresas que tienen que ser ejecutadas”. “Para ir a comprar un boli, hemos tenido que hacer álgebra y malabares”, comenta.
el único municipio que no tiene PFEA porque no estamos al corriente con la administración, nuestra lucha es quitar esa deuda de la Seguridad Social para poder afrontar todo lo demás. Es la pescadilla que se muerde la cola: hasta que no nos quitemos esa deuda no nos va a entrar nada, pero es que hasta que no nos entre nada no podemos quitarnos la deuda”, explica.
Envió cartas a la Diputación Provincial de Almería, la Junta de Andalucía y al Gobierno de España. “Tuve que hacer una llamada de socorro. La Diputación se está volcando con nosotros y nos va a asistir económicamente, y la Junta nos ha desbloqueado la Patrica, que estaba también cortada por falta de documentación. Falta que nos responda el Gobierno y que condone la deuda. En el pleno municipal presentamos una moción y el PSOE votó en contra del interés de Alhabia”.
Imaginación no le falta para buscar medios y recursos. “Las actividades de Navidad nos han costado poco más de 400 euros. Cuando entramos, las fiestas patronales estaban ya contratadas, verbalmente, porque no había expedientes de contratación por parte del anterior equipo de gobierno, pero al final las hicimos por la mitad”, cuenta, ya junto al árbol de ganchillo y muñecos de jengibre hechos con cartones por la AMPA Virgen del Rosario frente al Ayuntamiento.
“Si pudiera volver atrás, igual me lo pensaba. No me podía imaginar que el Ayuntamiento estuviera tan mal”