El brujo llegó al descanso: era el día para ganar un partido

Me resisto a creer en esas cosas que unos le llaman gafe y otros brujería. Para creer prefiero a Dios pero que algo hay en el entorno del Almería es tan verdad como la vida misma. Si no le ganamos ayer al Athletic ‘cansado’ con todos los ingredientes a favor, ya me contarán cuando va a ganar el Almería de Garitano a alguien. El campo registró un gran ambiente para ser lunes a las 9 de la noche. Una afición que lo perdona todo quería ver a Jonathan Viera que hasta llegó a calentar pero el brujo no quiso que debutara. Todo estaba preparado. El Athletic

maniatado por un buen Almería pese a las bajas. Maximiano haciendo paradas imposibles. El equipo perdonando en un remate del Choco Lozano. Hasta jugando bien ante la cara de asombro de un Valverde que había dejado dinamita en el banquillo. Jonathan ya reinaba por el banquillo del Almería y a Garitano se le notaba convencido de ver caer a su Athletic en Almería frente a los suyos. Valverde trató como a un colista al Almería y salió con lo justo al verde y muchos de los mejores descansando junto a él, pero vestidos de corto por si el Almería les daba un susto. El partido iba equilibrado y no le legaba a un equipo que ganando en el Mediterráneo se ponía en plaza de Champions. A toda máquina lo de daba al Athletic frente al Almería. Parecía todo normal o casi imposible ver tan ordenado a un Almería que estuvo impecable en defensa concediendo solo cuatro ocasiones de gol a lo largo del partido, dos de ellas en la primera parte donde no parecía que ese gafe hubiese ido al partido. Pero este año siempre pasa algo y llegó el brujo al descanso y lo puso todo patas arriba. Lopy, el senegalés más cotizado del Almería no brilló en la primera parte y llegaba tarde a los balones ante el Athletic. Parecía que tenía grillo en la cabeza por aquello de tener los ojos del Fútbol Club Barcelona sobre él. Pero dentro de lo que exigía el partido estaba hasta que a los pocos minutos de la segunda mitad se sentó en el césped y pedía el cambio. No caminaba con molestias y al final dijo Gaizka Garitano que todo respondía solo a molestias estomacales.