Absuelto de dos robos a punta de pistola al existir dudas para identificarlo
Las características del acusado no se corresponden con la descripción del autor de los hechos
Una juez de Almería ha absuelto a un hombre, para el que la Fiscalía solicitaba diez años de prisión, por dos delitos de robo con violencia mediante el uso de una pistola ante las “dudas” planteadas para identificar plenamente al investigado, sentido el que se ha ordenado su puesta en libertad ya que estaba en prisión provisional desde el pasado 16 de septiembre a la espera de juicio.
En su sentencia la magistrada señala la existencia de indicios suficientes para enervar la presunción de inocencia del acusado, al que se achacaba el hecho de haber atracado en un mismo día a punta de pistola a un hombre en la calle así como a la propietaria de una pollería de la capital.
La resolución recoge que ninguno de los dos perjudicados pudo ratificar durante el juicio que el acusado fuera el atracador al que se enfrentaron, ya que este llevaba la cara tapada, de modo que el primero no pudo verle el rostro mientras que la segunda se mostró “bloqueada” y no podía reconocer con nitidez los rasgos que, durante la fase de investigación, le habían servido para identificar al sospechoso.
En esta línea, la juez incide además en que las características del acusado no se corresponden con la descripción del autor de los hechos realizada por la primera de las víctimas, puesto que en su momento aseguró que el atracador era un hombre “más o menos de su misma estatura” y “de mediana edad, entre 45 y 50 años”, toda vez que el encausado “es más alto y mucho más joven”.
“Manía” La juez señala las “dudas fundadas” que existen sobre la fiabilidad del reconocimiento fotográfico, ya que al principio ninguno de los perjudicados aseguró poder reconocer al autor porque llevaba el rostro parcialmente cubierto, de modo que podría haberse visto “influenciado por las manifestaciones espontáneas de los vecinos.
El atracador que asaltó la pollería se llevó consigo la caja registradora, sentido en el que la juez también hace referencia al hallazgo en la casa del acusado de seis tickets de compra correspondientes al establecimiento, si bien señala que en el momento en el que se hizo el registro, la puerta de la vivienda estaba arrancada y el bombín tirado en el suelo. El acusado, por su parte, negó su participación en los hechos y aseguró que los vecinos “le tienen manía” y por eso “han ido a por él”, toda vez que pensaba que los tickets se los “pusieron” en su casa.
La primera de las víctimas aseguró que el encausado “es más alto y mucho más joven”