Las competiciones deportivas, sin aficionados en las gradas

Racing, O Parrulo y Baxi han tenido que adaptarse a las nuevas condiciones marcadas por la pandemia del covid

El deporte, que siempre ha dado ejemplos de superación, no ha sido ajeno a la crisis por la pandemia del covid-19. Aturdido y detenido en un primer momento, ha buscado soluciones para salir adelante. El deporte, como alternativa para una vida saludable, así como una opción de ocio, ha servido para ayudar a la gente a adaptarse a una nueva y desconocida realidad. Los clubes profesionales, con más medios, han podido salir adelante con inversiones en aislamiento y test. Los derechos televisivos les han permitido tomar todo tipo de precauciones, aunque las competiciones se reanudaron sin aficionados en las gradas.

Para el resto de las entidades y deportistas individuales, cada uno ha sobrevivido como ha podido, con escasas ayudas institucionales para paliar la falta de apoyo de una masa social, que ayuda a sostener las entidades con sus cuotas. Es el caso del Racing, O Parrulo y Baxi, tres de los clubes más representativos del deporte en la ciudad, que han sufrido para poder salir adelante y mantener su actividad. El deporte de base sigue paralizado por precaución.

A nivel individual, los estandartes del deporte de Ferrolterra, el triatleta Javier Gómez Noya o la jugadora de balonmano, Alicia Fernández, han sufrido la suspensión de los Juegos de Tokio. Noya, ahora embajador del Camino Inglés, sumó éxitos como el subcampeonato europeo de esprint en Barcelona, o el nacional de media distancia. Alicia disputó el Europeo con la selección española, una competición en la que Las Guerreras no tuvieron mucho acierto.