«Me encantó Extremadura. Era un viaje muy deseado»

Josefa Barros es una gran lectora y entre sus aficiones está leer el periódico cada mañana: «En papel, ¡eh¡. Porque leer un libro o un diario y poder tocarlo tiene algo especial». Josefa repasa cada día La Voz y en una de esas mañanas, con los meses de pandemia pesando en el ánimo, vio una promoción para los suscriptores. La Voz ofrecía un viaje para conocer Extremadura, pero no sus monumentos, sino sus campos, su naturaleza, su ecología.

Como suscriptora que es desde hace muchos años, beneficiaria de alguna que otra promoción, tomó la decisión. «Me apetecía naturaleza y Extremadura me fascina», asegura. Confiesa que fue un viaje fantástico, porque todo salió perfecto. «Un autobús súper cómodo. Unos guías atentos y la suerte de una meteorología inmejorable». Incluso alaba al resto de los integrantes del grupo, todos suscriptores de La Voz llegados desde todas las partes de la comunidad.

Todos conocieron cómo viven en la dehesa extremeña esos cerdos ibéricos de los que salen los buenos productos de la tierra. «Fue una visita muy exhaustiva y agradable. Y nos llamó la atención que no vendían nada. Solo querían mostrarnos cómo era la cría. Muchos hubieran comprado algo», añade. Visitaron una quesería donde se elabora la Torta del Casar, el queso de la zona. Un lugar que a Josefa le gustó especialmente: «No soy de queso. Pero desde que volví de la visita siempre tengo en casa».

Vieron una almazara para obtener aceite y recorrieron el campo en un vehículo especial para observar de cerca los toros de lidia de la ganadería de Vitorino Martí. «Fue diferente a la mayoría de los lugares a los que sueles ir», asegura. *

Encuentro con la naturaleza Entre las ofertas que se pueden disfrutar en el club están los descuentos en viajes, como el realizado recientemente a Extremadura