La Voz de Galicia (Lugo) - La Voz de Galicia (Lugo) - Especial3
El covid anuló lo más sagrado
La Semana Santa fue la primera celebración cancelada por la pandemia. Un suceso inédito en casi ochenta años de tradición de Confrarías en Lugo
Apenas tres semanas después del Estado de Alarma, le tocaba el turno a las Confrarías lucenses acompañadas de la Armada Española y la Marina de Ferrol, que históricamente llenaban las calles de dentro de la muralla.
Desde 1942, cuando se crearon las Confrarías en Lugo, las entidades religiosas no habían vivido nada semejante. Fueron las primeras grandes fiestas que se tuvieron que suspender y que se pasaron al que se convirtió en la nueva realidad: el mundo virtual. La Semana Santa cuadró en pleno confinamiento estricto, por lo que no se convocaron procesiones ni ningún tipo de acto. En el día grande de la celebración, el Domingo de Ramos, tan solo un par de sacerdotes pasearon por la plaza Santa María paseando el amarillo de unas pocas palmas. Los religiosos fueron los únicos que tuvieron el privilegio de asistir a la Catedral, aunque presidieron unos bancos vacíos. La devoción y las oraciones de los feligreses se practicaron desde casa, pero conectadas con el obispado. En una rápida adaptación a las circunstancias, la Diócesis retransmitió las misas online y emitió las procesiones del 2019.
Ritos por Youtube
El obispo de Lugo, Alfonso Carrasco Rouco, presidió las celebraciones en la Catedral y fueron retransmitidas por el canal de Youtube de la Diócesis de Lugo. En esta misma plataforma, en Twitter y en Facebook emitieron las procesiones de año pasado. Una iniciativa «morriñenta», como calificaban los sacerdotes, pero que al menos conservó un poco la tradición.
En el resto de la provincia, los sacerdotes celebraron los ritos sin presencia del pueblo y en un lugar adecuado. Previamente comunicaron a los fieles la hora para que se unieran desde sus casas. Intentando mitigar una distancia a la que nunca se enfrentaron en los últimos 78 años.