JORGE JAVIER VÁZQUEZ
“He disfrutado del sexo, pero ahora busco complicidad”.
Tras una temporada de éxitos pero con un susto grave de salud, el presentador posa en bañador a los 49 y confiesa: “Me preocupa conocer gente con la que pueda surgir algo”
“Lo que más me preocupa ahora es dónde puedo conocer gente. Eso le pasa a la gente de mi edad que se ha quedado sola”
HaHa sido una temporada de audiencias masivas con ‘GH VIP’, ‘GH DÚO’ y ‘Supervivientes’, pero también de angustia por el ictus que sufrió en marzo. En esta entrevista exclusiva, Jorge Javier nos cuenta en qué punto se encuentra emocionalmente.
Acabas de cumplir 49. Es el primer cumpleaños después del susto. ¿Sientes que has vuelto a nacer?
-No me reconozco en esa expresión, pero sí es verdad que ha sido un cumpleaños muy extraño, de transición a esta nueva vida a la que me tengo que acostumbrar. Tras la operación, no fui muy consciente de lo que había sucedido. Todo fue tan rápido. El cirujano que me operó ya me dijo que estaría sensible y tenía razón. Han sido unos meses emocionalmente complicados. complicados. He tenido que hacer frente a cosas que no me esperaba. En diciembre, estaba en el mejor momento de mi vida y así era, y ahora me doy cuenta de que estoy a punto de entrar en otra década de mi vida y las prioridades comienzan a ser otras, y una de ellas es la salud.
¿Hasta ahora no te había preocupado la salud?
-Nada, en absoluto. Jamás tuve un problema. A los cuarenta y tantos, la salud es algo abstracto, abstracto, pero ahora la expresión expresión ‘cuidarse’ tiene mucho más sentido. Y por primera vez en mi vida, la muerte ha sido algo más que un pensamiento. Ha estado presente en mi vida, y no solo en mi caso. Gente muy cercana a mí ha tenido problemas de salud muy importantes. Dos de mis mejores amigos y yo podríamos haber muerto este año. Así de claro.
¿Cómo te ha cambiado la vida?
-Estoy empezando a darle importancia importancia a mi tiempo, a mi descanso, a decir que no, y no quiero permitirme forzar la máquina. Y estoy acomodándome a otro tipo de situación: la de ser soltero. Me pasa lo que a cualquier persona de mi edad que se separa, que no tienes con quién salir. Es muy complicado salir cuando toda tu vida anterior la has forjado con tu pareja y tus amistades, y no he hecho bien lo de tener una vida aparte. Es verdad verdad que no la necesitaba, pero ahora me encuentro con una vida que llenar y no sé cómo. Es algo que me inquieta, pero para bien, saber cómo va a ser esta nueva vida en la que voy a tener que enfrentarme a una nueva realidad.
¿Esa nueva realidad es la soledad?
-Me muevo bien en la soledad. No es ningún enemigo, pero tengo 49 años y tengo la necesidad de conocer gente, de relacionarme.
¿De forma amistosa o sentimental?
-Sentimental lo pienso y lo veo muy complicado. Incluso, fíjate, creo que estoy pensando mucho sobre la sexualidad.
¿Y qué piensas?
-En estos momentos, en que ha acabado la temporada y que estoy de descanso profundo, estoy como haciendo un repaso exhaustivo a mi vida y lo vivido, vivido está, pero no quiero repetir patrones. He disfrutado al máximo del sexo, he salido y he entrado… Pero, ahora, en este terreno busco algo de complicidad.
¿Eso quiere decir que, además del sexo, haya otro tipo de relación?
-Una mínima charla antes y una mínima charla después. Es lo que me apetece. Lo otro ya lo he vivido y me lo he pasado muy bien. Creo que estoy dando carpetazo a una época
“Estoy acomodándome a mi nueva situación de soltero. Le pasa a cualquiera que se separa, que no tienes con quién salir”
“Me muevo bien en la soledad, pero tengo la necesidad de conocer gente”
de mi vida y me apetece entrar en otra.
¿Has cerrado Grindr?
-Hace mucho que no lo tengo, porque me aburría. Lo que más me preocupa ahora es dónde puedo conocer a gente. A la gente de mi edad que se queda sola, llega un domingo domingo por la tarde y a quién llamas o con quién quedas. No lo sé. Conocer a gente con la que pueda surgir algo. Y si a eso le añades el inconveniente de la popularidad, me encuentro que no sé por dónde tirar.
¿Lo que buscas es un ‘follamigo’?
-No busco, pero si aparece algo, me apetecería que me moviera también un poco en lo sentimental, aunque solo fueran dos noches. Que aparte del sexo pudiera compartir también una película.
Se llegó a publicar que el ictus te lo había provocado el estrés. ¿Es muy estresante la vida de una estrella?
-[Risas] Con la perspectiva, creo que llevaba una vida a una velocidad supersónica, pero es que yo era muy feliz con esa vida. Muy, muy feliz, sinceramente. Sentía que tenía estrés, pero me lo pasaba tan bien que, a mí, me compensaba. Cuando se habla del estrés, no creo que siempre sea negativo… Mira, hay una época de tu vida en que tienes que darlo absolutamente todo, y si te quedas por el camino, mala suerte. Tampoco vamos a vivir como si fuésemos una camelia, que por las noches nos tenemos que poner en una urna de cristal cristal para no marchitarnos. La vida tiene riesgos, claro, pero a determinadas edades uno tiene que jugársela.
Vamos, que no hemos de sentir lástima por ti.
-En absoluto. Lástima ninguna. En ningún momento yo he sentido lástima por mi vida y me echo las manos en la cabeza y me digo: “Ni en tus mejores sueños”. Con todo, eh. Pero sí es verdad que estoy entrando en una época en la que me gustaría introducir cambios.
¿De qué tipo?
-Pues mira, he dado con una psicóloga muy buena, con la que estoy aprendiendo que la tristeza también forma parte del proceso. Después del ictus, tuve un bajón muy grande pero ahora entiendo que esa tristeza es normal. En esta sociedad no estamos preparados para enseñar la tristeza. Para que te hagas una idea, despues del ictus, dejé de cerrar con llave la puerta de mi dormitorio. Me daba miedo que me pasara algo y que no pudieran ayudarme.
¿Qué más te dice tu psicóloga? psicóloga?
-Me habla de términos que antes me parecían rancios y ahora me parecen atractivos, como estar en paz con uno mismo, aceptar la vida que tienes, no estar permanentemente intentando estar encima de la ola en todos los aspectos, en el sexual, en el sentimental, en el trabajo… Es que no solo no es bueno, sino que no es sano.
Aceptar la vida que tienes, ¿es renunciar a la insatisfacción?
-Se trata de aceptar que no todos los días puede haber fuegos artificiales, y que no todos los días tienes que estar buscándolos. Y yo he estado toda mi vida buscándolos. No puede ser. Durante una época de tu vida, tienes que intentar exprimirla al máximo. Antes, cuando salía, me retiraba retiraba el último. Y siempre que conoces a alguien crees que te vas a enamorar hasta el tuétano y que te va a solucionar la vida. Lo que estoy
“Hay una época de tu vida que tienes que darlo todo, y si te quedas por el camino mala suerte” “Yo sentía que tenía estrés, pero era muy, muy feliz”
“El cirujano que me operó me dijo que estaría más sensible y tenía razón. Han sido unos meses emocionalmente complicados”
“Con mi psicóloga estoy aprendiendo que la tristeza también forma parte de un proceso”
aprendiendo es que la vida no tiene solución, eso para empezar, y que la vida se la soluciona uno mismo, y que el día a día puede ser maravilloso, tranquilo.
Siempre te ha costado aceptar las etapas tranquilas.
-Es que yo creía que las etapas valle eran la infelicidad.
Han salido unas fotos tuyas en Cerdeña. En ellas parece que te has reconciliado con tu ex, P.
-Si estuviera con alguien, de verdad, no me importaría decirlo. Pero es que tenemos una relación de familia. No entiendo por qué no te puedes llevar bien con tu ex. Me da mucha rabia. Creo que tenemos que ser un poco maduros con los sentimientos y las emociones, y que un ex puede ser un amigo o familia. Tenemos que luchar para llegar a eso. Que por sistema una persona no pueda tener relación con su ex, por ahí no paso.
Habéis estado juntos diez años.
-Los más importantes de mi vida. Y borrar a esa persona que ha estado conmigo los diez años más decisivos de mi vida, me parece una tontería.
Al final, es una relación casta. El sexo cuando llevas tanto tiempo con alguien es casi incestuoso.
-Pero que lo que me pasa a mí, le pasa a mucha gente. Estoy libre, pero sin la lucecita verde encendida.
Se ha publicado que Mila va a ir a ‘GH VIP’, ¿te gustaría?
-Me encantaría. Yo estoy animándola constantemente.
Y ella parece que no se decide.
-Que yo sepa, todavía no hay nada cerrado. Pero yo la animo a que entre en ‘GH VIP’ porque, además, creo que para ella puede ser una experiencia muy buena.
¿Por qué?
-Primero, porque cortas con tu vida y eso está muy bien y puede ser muy ventajoso. También porque te relacionas con otro tipo de gente, que nosotros llevamos tantos años juntos que ya nos conocemos como una familia. Y con la familia viene bien de vez en cuando despegarte y oxigenarte. Pero yo le digo que si entra en ‘GH VIP’, tiene que vivirlo con alegría.
¿Eso qué quiere decir?
-Que tiene que entrar muy convencida de pasárselo bien, de vivir la experiencia. A mí, me encantaría entrar en ‘GH VIP’.
Así que tú crees que Mila al final se decantará por ir.
-Espero que Mila vaya. Y también sé que si va, nuestra relación va a pasar por momentos complicados. Mila es una de mis mejores amigas, pero si entra, entonces, es una concursante de ‘GH VIP’. Y como concursante, yo le puedo exigir muchísimo.
Ella lo va a dar todo.
-Desde luego, pero yo sé que esto va a poner nuestra amistad a prueba.
Sería una trama más del concurso.
-Por eso tiene que entrar.
¿Cómo se afronta una nueva edición de un reality después del brutal éxito de ‘Supervivientes’?
-Mira, cuando hicimos la gala final de ‘Supervivientes’, hicimos un 40,6, que debe ser como la final de un mundial o casi. Me acuerdo que, al día siguiente, fui a despedirme de Vasile por las vacaciones y, al ir para su despacho, me encontré a un montón de trabajadores que estaban desmontando toda la parafernalia que se había montado la noche anterior para recibir a los supervivientes… y aquello ¡era un amasijo de hierros! Y le dije a Paolo cuando lo vi: “¿Ves? Esto es la televisión, el olvido”.
“Dos de mis mejores amigos y yo mismo podríamos haber muerto este año. Así de claro”
“Después del ictus, dejé de cerrar con llave la puerta de mi dormitorio”
“Me daba miedo que me pasara algo y que no pudieran ayudarme”
¿Por qué Kiko Hernández no va nunca a un reality?
-Creo que le tira para atrás que sus hijas son muy pequeñas. Pero últimamente sí me ha comentado que le haría gracia entrar. A ver, Kiko Hernández es un animal televisivo de primera categoría y una persona de las que más controla este tipo de programas. Tiene un olfato brutal, una rapidez tremenda y una mirada televisiva envidiable. Es una persona que, para este tipo de programas, pocos hay de su valía.
Acaba el curso, ¿qué colaborador de ‘Sálvame’, según tú, tiene que volver a examinarse en septiembre?
-A Gustavo González lo apuntaría a un cursillo de ventas. Es una persona que maneja información, pero a veces le falta el sentido del espectáculo. Otros, con unos mimbres más humildes, te diseñan una catedral gótica.
¿Y quién tiene la matrícula de honor de este curso televisivo?
-Ha sido la temporada Pantoja. Y creo que el ‘post’ lo está haciendo muy bien. Que entrara en ‘Sálvame’ me ha parecido muy inteligente por su parte. Lo del abrazo con Mila me parece un síntoma de madurez, creo que ya somos muy mayores y esas guerras enquistadas enquistadas hay que disolverlas. Eso no quita que después tú tengas libertad para decir lo que te gusta y lo que no. Madurar es también cambiar de opinión y ser contradictorio, si no menudo aburrimiento.
Me han dicho que tienes celos de Isabel Pantoja.
-¿Celos de Pantoja? Es que jugamos en ligas totalmente distintas. Si viniera a Telecinco y me dijeran: “Mira, todo lo que haces tú lo va a hacer ella”…
Pues eso, ¿te imaginas a Pantoja presentando ‘Supervivientes’? ‘Supervivientes’?
-Pues tendría que aceptarlo. También ‘Supervivientes’ antes lo han presentado otros y llegará el día en que me digan: “Adiós, muy buenas”.
Los celos son irracionales.
-Cómo voy a tener celos de una señora que ha protagonizado la edición más vista de la historia de ‘Supervivientes’. ‘Supervivientes’. Sería muy idiota por mi parte. Ya me gustaría tener cada año una Pantoja en todo lo que yo presentara.
“Sé que si Mila va a ‘GH VIP’ nuestra amistad pasará por momentos complicados”
¿Qué fue lo primero que os dijisteis los dos cuando os quedasteis solos, después de la isla?
-Mi relación con Pantoja está llena de silencios. Una relación como de familia en la que imperan los silencios. Cuando ella viene a Telecinco en 2011 a recoger a Kiko Rivera –aquello era impensable porque yo había estado presentando cinco años el ‘Tomate’–, ella viene y, cuando nos encontramos, fue como si nos hubiéramos visto el día antes. Y esta vez ha sucedido lo mismo. El porqué, pues no lo sé. Pero creo que tenemos una gran capacidad de… no sé qué decirte con respecto a esto.
Yo creía que entre vosotros habría una conversación, aunque fuera pequeña, una regañina…
-En este tipo de trabajo no se tienen relaciones normales. Tengo asumido que con Pantoja habrá épocas buenas, otras menos buenas, otras malas… Es complicado que nuestra relación sea siempre buena, a no ser que dejemos de hablar de ella. Es uno de los personajes que más comentarios provoca y que más pasiones levanta. Ella siempre se va a sentir molesta o poco de acuerdo con lo que se diga de ella.
¿Lo que sientes por ella se podría calificar de cariño?
-A veces, cuando hemos hablado por teléfono, dan ganas de protegerla. ¿Qué te parece?
¿La ves indefensa?
-En una publicidad, sí que pudimos hablar un poquito. Desde fuera, piensas que la vida que lleva es un muermo: “Ay, esta señora, siempre encerrada en Cantora”. Y en un momento le dije: “Fíjate, Isabel, que mi casa es mi Cantora, es que de mi casa no salgo”. Entiendo que a la gente que le cuento mi vida le puede parecer también un coñazo. Pero es que a lo mejor ella es feliz ahí. Otras veces no estoy nada de acuerdo con ella. Pero creo que por primera vez en mi vida me siento libre para tener una charla con ella.
“Mi relación con Pantoja está llena de silencios. Pero por primera vez me siento libre de tener una charla con ella”
“El abrazo entre Mila y Pantoja me parece un síntoma de madurez. Hay que disolver esas guerras enquistadas”