Raquel Mosquera
Asfixiada por las deudas.
Antes de la pandemia sus negocios estaban en números rojos, y este último año las cosas han empeorado. Hace poco, Hacienda le imponía un segundo embargo
RaquelRaquel Mosquera vive uno de sus peores momentos. A su reciente ingreso hospitalario por una crisis de la enfermedad mental que padece se suma ahora un grave problema económico que no consigue solventar. LECTU-RAS
LECTU-RAS ofrece una información exclusiva que evidencia que la ruina acecha a la peluquera. Vende su casa de Galapagar (Madrid), acuciada por las deudas. Si no logra deshacerse de su nave nodriza, podría perderlo todo. El esfuerzo de décadas. Nadie puede negar que la peluquera es una gran amante de su trabajo, jamás lo ha abandonado, a pesar de ser un personaje del corazón muy querido.
TIENE DOS EMBARGOS
Sobre el chalé que la Mosquera adquirió en 2002 pesan embargos administrativos desde 2016, uno a favor de Hacienda para responder por 5.111,42 euros y otro de este mismo año, probablemente el que la ha empujado a vender su hogar. La Agencia Tributaria anotó un gravamen preventivo el pasado 3 de febrero por el que le reclama 11.911,02 euros. Sobre su vivienda de Galapagar pesa una hipoteca –ampliada en 2013– por valor de 270.455 euros, que terminaría de abonar en 2044. Su situación económica es precaria desde hace años, en 2020 se vio obligada a pedir una moratoria de 3 meses y ampliar 9 meses el vencimiento del préstamo.
GOLPEADA POR LA PANDEMIA
Carrasco y Mosquera, S. L., la empresa de la que Raquel es administradora única, pasa por graves dificultades económicas. En las últimas cuentas, presentadas antes de la pandemia, queda patente que la crisis era ya un hecho. En marzo del año pasado presentaba las cuentas de 2019, y el resultado era muy preocupante: las pérdidas ascendieron a 52.641,60 euros. Según la documentación a la que hemos tenido acceso, el sueldo que percibía ese año la peluquera peluquera estaba estipulado en 21.172,52 euros. Sobre esta sociedad pesan también varias deudas con el Ayuntamiento de Galapagar, la última de febrero de este mismo año. A esta gran merma financiera hay que sumar la dramática situación en la que la pandemia ha dejado a muchísimas pequeñas sociedades. La suya no es una excepción. Trabajadora empedernida, Raquel es una de tantas emprendedoras que sufren durante estos tiempos. La venta de su chalé, por el que pide 499.500 euros, es la única salida de la Mosquera
para eludir la quiebra. Construida sobre una parcela de 654,55 m2, la vivienda unifamiliar cuenta con 213,37 m2 distribuidos en dos plantas. Deshacerse del que ha sido su hogar desde que abandonara abandonara el piso del paseo de la Habana que compartía con Pedro Carrasco debe ser un gran varapalo emocional. Parece su única salida.